El regreso de Marcelo Gallardo a River trajo con sí un cambio de aire necesario en el club. Los hinchas renovaron la ilusión, la mano del DT se empieza a ver de a poco, aunque el camino es largo y tendrá que ser sobre la marcha ya que su retorno se produjo en plena competencia. El Muñeco también trajo refuerzos de jerarquía, el primero en llegar fue Germán Pezzella, luego se sumaron Fabricio Bustos y Maxi Meza. El próximo en hacerlo será Marcos Acuña, quien no estaba en el radar de nadie hasta que el domingo pasado explotó la bomba y sorprendió a propio y extraños.
Para el puesto de lateral por izquierda, River cuenta con Enzo Díaz, Milton Casco -quienes no tuvieron buenos rendimientos en los últimos tiempos- y también con Franco Carboni, la apuesta que arribó en este mercado de pases, pero que parecería que no será tenido en cuenta por Marcelo Gallardo. El Muñeco considera que se necesaria experiencia y jerarquía para ir por la Libertadores y Marcos Acuña tiene ambas virtudes, también que hay sumar que tiene una gran personalidad.
El día que se puteó con Diego Milito en Racing
Por el Campeonato de Primera División de 2015, Racing visitó a Independiente en el Libertadores de América. El Rojo se quedó con el clásico por 1 a 0 en un partido que tuvo todos los condimentos propios de un enfrentamiento entre dos rivales de toda la vida. A los 19 minutos del primer tiempo, Jesús Méndez le da un codazo al Huevo que cae al piso, pero el mediocampista del Rojo solamente recibe una tarjeta amarilla.
Quince minutos más tarde, Acuña le devuelve la gentileza a Méndez, pero en esta oportunidad Patricio Loustau decide mostrarle la tarjeta roja al lateral de la Academia, quien increpa al árbitro mientras Diego Milito quiere separarlo, algo que no le gustó nada al Huevo. Luego se supo que, en el entretiempo, el capitán de Racing cuestionó la actitud de Acuña, quien no se quedó callado y tuvo un fuerte cruce con el ídolo.
A las trompadas en Portugal
Luego de un gran paso por Racing Club, Marcos Acuña desembarcó en el fútbol europeo, más precisamente en Sporting Lisboa de Portugal. En mayo de 2018, la situación en el conjunto de la capital portuguesa no era la ideal y los barras fueron a apretar a los jugadores con tres focos bien marcados: Jorge Jesús -el DT- y los argentinos Rodrigo Battaglia y Marcos Acuña.
El Huevo no se quedó en el molde y se fue a las piñas con quienes intentaron amedrentarlo, viviendo una situación más que incómoda tanto en ese momento como en los días posteriores. Luego se supo que el presidente dio vía libre para que eso pase. Con el cambio de la dirigencia, la situación se encaminó y en 2019 el Huevo gritó campeón con el Sporting Lisboa.