Después de un trabado y discreto empate en Villa Domínico, la imagen de la mañana en la Reserva de Boca fue el enojo de Exequiel Zeballos con Hugo Ibarra, que decidió sustituirlo a falta de menos de 10 minutos para que culmine el encuentro.

El enojo en sí no fue lo que llamó la atención, sino la forma de demostrarlo. El delantero del Xeneize no saludó al que ingresaba por él y después se descargó con uno de los tachos que estaba del otro lado de la línea de cal.

Minutos más tarde, ya un poco más frío, la joyita del club de la Ribera salió a aclarar la situación. "Fue un momento de enojo por el resultado. Ya le pedí disculpas a él y a mis compañeros", escribió en su cuenta oficial de Instagram junto a una imagen suya con Langoni, que fue quien lo reemplazó en el partido.

Tras la furia, Zeballos aclaró rápido la situación y le puso paños fríos a cualquier polémica. Sin lugar a dudas, un buen gesto después de una bronca que puede tener cualquiera.