Después de quedarse merecidamente con el Superclásico,Bocaviajó al Sur para medirse ante Lanús en La Fortaleza y, para dicho encuentro, Hugo Ibarra decidió hacer una leve rotación en el equipo. Además del suspendido Marcos Rojo, descansaron Alan Varela, Darío Benedetto y el juvenil Luca Langoni.
Es por eso que, en ausencia de los dos delanteros titulares contra River, fueron Norberto Briasco y Luis Vázquez los que hicieron dupla en el último tercio del campo de juego para poder hacerle daño al Granate. Sin embargo, el poder ofensivo del Xeneize fue bastante pobre durante el primer tiempo y ni siquiera hubo remates al arco.
Para colmo, Ibarra se vio obligado a meter mano en el equipo ante la inesperada lesión del exdelantero de Huracán. Briasco intentó cortar un balón, pero pisó mal con su tobillo izquierdo e inmediatamente se tiró al suelo esperando la atención médica. La reacción del jugador fue de desazón total: hubo lágrimas desde que lo atendieron hasta que se sentó en el banco.
Es que el armenio había vuelto de una prolongada ausencia por lesión y pudo mojar contra Colón, una señal más que positiva en su regreso a las canchas. Tras la victoria contra el Millonario, el atacante tuvo la oportunidad de ir como titular ante Lanús y seguir sumando rodaje, pero una nueva lesión estanca su progreso y habrá que esperar a estudios médicos para determinar la gravedad. Una verdadera lástima.







