El presente y el futuro de Marcos Rojo es una incertidumbre absoluta. Es que desde el pasado 1 de julio, al quedarse solo seis meses de contrato en Boca, el defensor mundialista está en condiciones de firmar un precontrato con cualquier equipo que le acerque una oferta.

Mientras tanto, en el Xeneize pretenden renovarle y él también manifestó sus intenciones de hacer lo mismo, pero ambos coinciden que primeramente es necesaria que se dé su vuelta a las canchas tras las recientes lesiones que padeció y que le impiden decir presente en el equipo desde hace más de ocho meses.

Rojo estuvo a punto de regresar al campo de juego en dos ocasiones tras la grave lesión ligamentaria que sufrió pero, producto de la recuperación y las prácticas diferenciadas, el defensor de 33 años sufrió dos desgarros consecutivos que lo alejaron un tiempo más de las canchas.

Este último lo sufrió el pasado martes y lo dejará afuera por al menos 20 días más y, según informaron, esta situación preocupó mucho anímicamente al propio Rojo e hizo que en Boca estén atentos a su estado físico y anímico.

En ESPN F12, tanto el periodista Esteban Edul como el colega Martín Costa soltaron al respecto: “Rojo está mal anímicamente, el viernes ni fue a entrenar. Él en enero tuvo una situación complicada sobre esto y los referentes lo animaron. Siguió con la recuperación y se recuperó. Pero en menos de un mes se desgarró dos veces. En Boca quieren saber si es una cuestión de los médicos o un tema personal“.

De todas formas, y al margen de esta información, Augusto César reveló que se encuentra entrenando y buscando recuperarse de la mejor manera posible y que este desgarro sería más leve que el anterior, por lo que regresaría en poco menos de tres semanas a las canchas. Igualmente, en Boca están atentos a su situación.