En 2015, el Tottenham hizo oficial la llegada de Heung-Min Son, un joven delantero coreano de apenas 23 años, proveniente del Bayer Leverkusen. En aquel momento, nadie se imaginaba que ese prometedor delantero que venía de destacar en Alemania, se transformaría en una leyenda del club.
Tras defender los colores del club por 454 partidos, en el que convirtió 173 goles y repartió 101 asistencias para ser el máximo asistidor en la historia de la institución, este 3 de agosto de 2025, ese delantero jugó su último partido con la camiseta de los Spurs. Fue en su Corea natal, en un estadio colmado y protagonizando un momento más que emotivo.
El partido contra Newcastle, en la gira asiática de pretemporada, no fue más que una excusa y el juego pasó a segundo plano cuando a los 19 minutos de la segunda parte, el cartel mostró la salida del histórico #7 y capitán de los Spurs, el que portó la cinta cuando se levantó el primer título en 17 años, al ganar la pasada Europa League.
Compañeros y rivales se acercaron a saludar a Son, y hasta se pusieron de acuerdo para hacer un puente, aplaudirlo y darle palmadas en señal de respeto. Una vez que llegó al banco, la emoción le ganó a Son, que terminó apreciando el resto del encuentro entre lágrimas.
La MLS parece ser el futuro de Heung-Min Son
Heung-Min Son, el último jugador que quedaba del once de Tottenham que se alineó en cancha para enfrentar al Liverpool en la final de la UEFA Champions League 2018/19, se espera que siga su carrera en los Estados Unidos. El LAFC lleva algunas semanas detrás de su ficha y su salida de los Spurs parece estar ligada con esa propuesta.







