Los hermanos Ángel y Óscar Romero son de las principales figuras con las que cuenta San Lorenzo de Almagro en su actual plantel profesional. Sin embargo, repetidamente, los destacados jugadores paraguayos se han visto involucrados en diversos problemas disciplinarios. Igualmente, siempre pagaron con buenas actuaciones, sobre todo el primero de los mencionados.

Pero en los últimos días surgió un inconveniente realmente contundente y difícil de solucionar. Es que la escuadra de barrio porteño de Boedo ya no puede hacer frente a los elevados salarios de los futbolistas del seleccionado paraguayo, por lo que los mismos solicitaron tener la oportunidad de marcharse para buscar nuevos rumbos.

 

En medio de ese panorama, varios equipos se interesaron en los servicios de los Romero, entre ellos Boca Juniors. Y, según informaron en 'TNT Sports' este sábado, prácticamente se definió el futuro de ambos. ¿De qué manera? Tienen todo listo para que se les rescinda el contrato, quedar con el pase en su poder y elegir un nuevo destino.

Con esta resolución, los hermanos Romero cobrarán la deuda de 900.000 dólares que San Lorenzo mantiene con ellos. Será en 10 pagos a partir de marzo de 2022. Igualmente, desde la dirigencia del Ciclón les habrían puesto como condición a los jugadores paraguayos que no recalen en ningún otro equipo de la Liga Profesional de Fútbol.

 

 

Anteriormente, Ángel Romero supo defender las camisetas de Cerro Porteño y Corinthians, mientras que su hermano Óscar tuvo un recorrido un poco más extenso a lo largo de su trayectoria como futbolista profesional, vistiendo los colores del propio Cerro Porteño, Racing Club, Deportivo Alavés y Shanghái Shenhua.

Posteriormente, el propio elenco de Boedo comunicó la rescisión del contrato de ambos: