A lo largo de los últimos días, el mundo Racing estuvo convulsionado por la decisión que tomó Sergio Romero al firmar su vínculo con Boca. Y todo aumentó después de las durísimas declaraciones que tuvo el presidente racinguista, Víctor Blanco.
“Tengo la misma sensación de enojo de los hinchas, las palabras de Romero fueron desafortunadas, no hacían falta.Por un tiempo largo tendrá las puertas cerradas”, expresó el pope de la Academia, que incluso evaluó quitar el cartel que se encuentra en la cancha 1 del Predio Tita Mattiussi que posee el nombre de Chiquito.
Más allá del enojo que mantiene Blanco, en las últimas horas se pudo confirmar el gran gesto que tuvo el ex arquero de la Selección Argentina para con el club que lo formó,horas previas a que estampara la rúbrica en el contrato que le confeccionó Boca. Si bien ya había estado brindando una charla con los arqueros de las inferiores, Romero volvió a dejar bien en claro que el sentido de pertenencia no se borró de su vocabulario por haber pasado a otra institución.
Después de haber estado entrenándose durante 10 días en el Predio Tita Mattiussi, y a pesar de que el presidente de Racing no lo llamó para realizarle una oferta para retornar al club que lo vio nacer, Chiquito donó el piso de goma que se colocó en el gimnasio que está dentro del mismo terreno, y que utilizó en los días previos a transformarse en arquero de Boca. Pero hubo más.
Romero también le hará llegar a la institución de Avellaneda diversas máquinas para el gimnasio, entre ellas una bicicleta fija, además de que quiere que los arqueros juveniles tengan mejores guantes, por lo que también donará los elementos para que los chicos que sueñan con vestir la camiseta de la Academia tengan un mejor tránsito dentro de las categorías menores. Por algo, en su biografía de Instagram sigue figurando que posee sentido de pertenencia con Racing. Y al parecer, será difícil de borrar.
