Cuando el mundo estaba saliendo de la pandemia de Covid-19, Eddie Hearn firmó para la reconocida promotora británica MatchRoom Boxing a una peleadora australiana que apenas había realizado cinco combates como profesional, todos ellos con victoria, para darle la oportunidad temprana de pelear por un título interino en Inglaterra ante Shannon Courtenay.
Pese a lo incipiente de una carrera que había iniciado en 2019, Ebanie Bridges ya se había hecho fama en Australia como “La Bombardera Rubia” y se había vuelto furor en las redes sociales. Su ingreso al mundo del boxeo había sido atípico, pues comenzó como Ring Girl. Poco después, quiso dejar de sostener el cartel que anunciaba el inicio de un nuevo round y ponerse los guantes para estrenarse con una victoria en fallo dividido ante Mahiecka Pareno.
Cuando Bridges se estrenó como profesional tenía ya 33 años y estaba graduada como profesora de matemáticas, también especializada en educación física, en la Universidad de Western Sydney. Incluso había trabajado dando clases en un colegio secundario. Pero también estaba vinculada a los deportes de combate, por haber hecho karate durante su infancia y adolescencia, además de haber tomado tiempo después clases de kick boxing y Muai Thai.
El 7 de agosto de 2021, La Bombardera Rubia salió derrotada de su primera pelea en Reino Unido, en el Parque Olímpico Reina Elizabeth. Aunque le plantó batalla a Courtenay y se ganó el respeto de los fanáticos por completar los diez asaltos con una importante inflamación en el ojo izquierdo que disminuyó considerablemente su visión, los tres jueces la dieron perdedora en las tarjetas.
Ya en la previa de esa pelea Bridges había dado que hablar por acudir al pesaje en lencería y anunció que no había razón para que las boxeadoras no pudieran sentirse sexys, hermosas, deseadas. Aquello también se volvió una marca registrada que repitió en la previa de cada pelea, redoblando la apuesta e incrementando su popularidad.
Consolidada con MatchRoom Boxing obtuvo victorias por nocaut ante Bec Connolly y por puntos ante Mailys Gangloff, ambas en 2021. Pero también ganó lugar en los portales de todo el mundo luego de declarar que estaba ganando mucho dinero respondiendo a un requerimiento de sus fanáticos en las redes sociales: que les vendiera fotos de sus pues después de entrenar.
“Gané un poco de dinero, no voy a mentir. Sin embargo, es muy extraño porque siento que estoy vendiendo desnudos cuando pienso en compartir una foto de mis pies sin calcetines. Es tan extraño. No tiene nada que ver con mis pies. Solo tiene que ver con estas personas y sus fetiches. No creo que realmente les importen (mis pies). Para mí es un negocio, no un juego”, había dicho al respecto.
En marzo de 2022, tuvo la gran oportunidad de pelear por el título mundial de peso gallo de la FIB y no la desaprovechó. En Leeds, ciudad que la aceptó como propia, se impuso en decisión unánime ante la argentina María Cecilia Román para coronarse. En diciembre de ese mismo año defendió con éxito su cinturón noqueando en el octavo asalto a Shannon O’Connell.
Pero después de un año sin pelear, perdió en Estados Unidos su corona en diciembre de 2023, siendo derrotada en fallo unánime por la japonesa Misho Yoshida. Desde entonces, Ebanie Bridges no ha vuelto a pelear, aunque tampoco ha anunciado su retiro.
Ebanie Bridges se convirtió en la favorita de los hinchas del Leeds United.
La vida de Ebanie Bridges tras perder el título mundial
Aprovechando la fama que le dio el boxeo, Ebanie Bridges abrió una cuenta de OnlyFans en la que comenzó a facturar mucho dinero. Se puso en pareja con el excampeón mundial británico Kell Brook y tuvo un hijo, por lo que decidió alejarse de los cuadriláteros y abocarse a la maternidad.
En más de una entrevista, La Bombardera Rubia aseguró estar pensando en retirarse del boxeo profesional para poder dar prioridad no solo a su familia sino también a una carrera como modelo. Pero ese anuncio todavía no ha llegado y son muchos los fanáticos que están esperando por su regreso, con los guantes puestos.
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