Allá por el año 2006, y, después de mucho trabajar para conseguir su fichaje, River Plate finiquitó el desembarco de Joaquín Arzura, interesante mediocampista que venía exponiendo muy buenos rendimientos con la camiseta de Tigre, donde había debutado en 2011 y donde había ganado terreno de forma progresiva, clara y contundente.

Sin embargo, lo cierto es que Arzura nunca terminó de engranar en el equipo por entonces comandado por Marcelo Gallardo. No contó con demasiadas oportunidades y en las pocas que tuvo no mostró el mejor nivel, por lo que solamente pudo aportar una anotación y ninguna asistencia al cabo de 19 compromisos de carácter oficial.

 

A partir de allí, Arzura deambuló a préstamo por varios equipos y siguió su carrera como jugador profesional muy lejos de River. Osasuna, Almería, Nacional de Montevideo, Huracán, Panetolikos e Instituto de Córdoba siguieron en el horizonte del futbolista nacido en Campana, provincia de Buenos Aires. Poco para lo que se llegó a esperar de él.

En ese contexto, este jueves se confirmó el nuevo equipo del volante que actualmente tiene 29 años de edad. Quilmes, que milita en la segunda categoría del fútbol argentino y quiere ascender de una vez por todas a la Liga Profesional de Fútbol de Argentina, apostó por las cualidades de Arzura, confiando en poder recuperar aquel interesante mediocampista.

 

No es un detalle menor que Arzura viene de conseguir el ascenso a primera división con Instituto, donde alternó titularidades con suplencias. El volante ya se puso a las órdenes de Mario Sciacqua, director técnico del equipo Cervecero que debutará en una nueva edición de la Primera Nacional el próximo 12 de febrero como local de Deportivo Riestra.