Pasaron días, semanas y meses. Sin embargo, Randal Kolo Muani sigue sin entender cómo no es el gran héroe de Francia. La jugada que terminó con Emiliano Martínez protagonizando la atajada más importante de la historia todavía no termina de asimilarse en la cabeza del delantero. Le va a costar mucho.

Una vez más, esta vez tres meses después de la histórica cita en Lusail, el atacante del Eintracht Frankfurt volvió a recordar ese momento en diálogo con L'Equipe: "Esa jugada podría haber cambiado mi vida. Hubiera preferido dejarlo en un segundo plano como todos los demás, como todos los franceses, pero sucedió y estos son los caprichos de la vida".

"Sigo mirando la jugada y veo que tengo muchas posibilidades de marcar, pero en el campo va todo demasiado rápido. Quiero seguir adelante, porque es parte de mi trabajo. No es que esté triste, pero no lo voy a olvidar nunca. Estuvimos muy cerca de traer la tercera estrella", agregó el 9.

Luego se sinceró como nunca antes y, sobre la jugada, no tuvo filtro: "No voy a mentir, lo odio". Sin lugar a dudas, la única chance que tendrá Kolo Muani para reivindicarse será protagonizando otro Mundial. Aún así, le será muy difícil. Sos enorme, Dibu.