En la jornada de ayer Ignacio Suárez soltó la bomba de la semana. José Antonio Rodríguez, exjugador del Club Universidad Nacional, recurrió al TAS (Tribunal de Arbitraje Deportivo) para reclamar el pago de la rehabilitación de la lesión que sufrió portando los colores del Auriazul, misma que Ares de Parga había prometido hacerse cargo tiempo atrás.

El exdefensor y canterano de Pumas UNAM se encuentra en silla de ruedas debido a una serie de lesiones que sufrió en el fémur que lo obligaron a pasar por cirugía 4 veces en 22 meses entre 2013 y 2014. A pesar de que pudo volver a jugar, en octubre de 2017 se sometió a una rehabilitación de un año en Aguascalientes luego de que el fisioterapeuta Gustavo Pasos le dé un ultimátum: "¿Quieres seguir jugando o caminar?".

José Antonio García, el canterano de Pumas que denunció al club (JAM Media)

José Antonio García, el canterano de Pumas que denunció al club (JAM Media)

Esta costosa rehabilitación fue pagada por José Rodríguez, quien luego reclamó en vano el reembolso a Ares de Parga, presidente del Auriazul en ese momento. De esta manera, el oriundo de CDMX recurrió al TAS y denunció al club: el órgano le dio la razón y aceptó el pedido. Pumas, por su parte, comunicó ayer: "Con relación a la demanda ante el TAS por parte del señor José Antonio García Fernández, el Club manifiesta que, en apego a la confidencialidad del procedimiento y respeto a las partes, no emitirá una declaración al respecto hasta tanto no se desahogue el mismo".

Ignacio Suárez, además de revelar el caso, se animó a ir más allá y advirtió a los Felinos. "En mi próxima entrega, les mostraré los alegatos de la defensa de Pumas ante el TAS, así cómo su negativa por escrito para pagar el arbitraje del juicio y el ridículo argumento de que el TAS no tiene jurisdicción", apuntó con contundencia el periodista en Twitter.

No quedó ahí: más adelante, aseguró que si Pumas UNAM no acata el dictamen del Tribunal de Arbitraje Deportivo corre riesgo de ser desafiliado. De esta manera, pone en verdaderos aprietos a la Universidad para que se hagan cargo de todo lo que exige José Antonio García, quien fue "abandonado" por el club de sus amores.