Este miércoles, en el Maracaná, Paolo Guerrero fue titular en la visita de Inter de Porto Alegre por la ida de los cuartos de final de la Copa Libertadores.

El delantero peruano era uno de los apuntados en la previa y jugó a puro carácter ante Flamengo.

 

En la segunda parte, Guerrero fue amonestado en los primeros minutos por una dura entrada ante Rafinha, recién llegado del Bayern Múnich.

El Depredador explotó de bronca contra el árbitro de primero y después encaró al brasileño, que estaba en el piso.

¡No se metan con Paolo!