Miguel Ángel Russo pudo celebrar su primera victoria oficial desde que regresó a Boca como entrenador, que además cortó con una larga maldición para el Xeneize sin poder derrotar a Talleres en Córdoba.
Pero en su análisis del partido, al que le adosó aquel partido debut ante Independiente, no ocultó que todavía no está del todo conforme con el funcionamiento.
“Necesitamos tener volumen de juego, precisión, cambio de ritmo, velocidad, intensidad… Y defensivamente ser fuertes. Tenemos que tener todo ese tipo de cosas. Que lo podemos lograr, seguro. Estará en la cabeza de cada uno buscarlo, porque es la idea y es la forma”, expresó en diálogo con el programa Halcones y palomas de TNT Sports.
Y para dejar en evidencia que el funcionamiento defensivo es lo que lo tiene menos satisfecho hasta la fecha, pese a que Boca solo recibió un gol en sus dos partidos disputados desde la reanudación de la Superliga, agregó: “Necesitamos defensores atentos en el juego, que no cometan errores”.
Las palabras de Russo pueden estar relacionadas con la temprana expulsión de Carlos Izquierdoz en el duelo ante Independiente y también con la desatención que permitió a Talleres descontar en Córdoba y amenazar el triunfo Xeneize.
Por otra parte, Russo intentó desligarse de cualquier tipo de comparación con el equipo que dirigía Gustavo Alfaro: “Soy respetuoso de mis colegas. No me gusta remarcar diferencias. Boca tiene buenos jugadores. Lo que yo intento es que haya una forma, una manera”.