Mientras al Mono Burgos le cuesta hacer ganar a un Newell’s golpeado, la reserva está goleando a Lanús en el primer tiempo por 3 a 0. En un viernes pasado por agua, la Lepra se mide con el Granate y ya podemos confirmar que nos dejó el mejor gol de la fecha.
Ramiro Sordo, juvenil de 20 años con un puñado de partidos en la primera del club rosarino, anotó el segundo tanto del triunfo parcial de su equipo. El mediocampista no hizo un golcito más, ¡fue desde la mitad de la cancha!
Cuando el encuentro estaba en una mínima victoria parcial de la Lepra, el pibe recuperó la pelota cerca del círculo central, dejó a un jugador en el camino, levantó la cabeza y sacó un derechazo extraordinario para que el balón sea incontenible para el arquero, que estaba algo adelantado.
¿Lo peor de todo? El jugador lo festejó como si hubiera hecho un gol empujandola sobre la línea. Puños apretados, abrazo con los compañeros y a sacar del medio. ¡Que golazo, animal!
