Finalmente, luego de una temporada plagada de incertidumbre y una pelea ante el Borussia Dortmund que se mantuvo viva hasta la última jornada, el Bayern Munich gritó campeón de la Bundesliga.

Con el partido 3 a 1 en favor de Los Bávaros gracias a los tantos de Kingsley Coman, David Alaba y Renato Sanches, (había igualado momentáneamente Sébastien Haller para el Eintracht Frankfurt), Niko Kovač mandó al campo de juego a Franck Ribéry y Arjen Robben.

La despedida de ambos de la institución (no seguirán allí a partir de la próxima temporada), fue ideal para cerrar una goleada histórica.

El primero en festejar fue el francés, que marcó un auténtico golazo eludiendo a varios rivales mientras se adentraba al área y definiendo con mucha clase.

El atacante de los Países Bajos celebró apenas seis minutos después que Franck, estampando así el 5 a 1 definitivo que finalmente le dio un nuevo título local al Bayern.

La mención de honor va para el subcampeón, dado que la victoria por 2 a 0 ante el Borussia Mönchengladbach no le alcanzó al Dortmund, que culminó segundo con una gran campaña basada en 76 unidades cosechadas.