Por los Octavos de Final de la Europa League, Wolverhampton y Olympiakos nos están regalando un partidazo al final de la primera etapa. Igualaron 1-1 en la ida y en Inglaterra están ganando los locales por 1-0. ¿El gol? La respuesta es bastante obvia.
Raúl Jiménez anotó el único tanto de la tarde mediante una gran definición de penal. Como de costumbre, el nacido en Tepejí del Río humilló al arquero rival desde los 12 pasos y la acomodo con categoría hacia el poste que éste dejó en descubierto.
Sin embargo, la jugada más llamativa de esta primera etapa no fue esa. El exdelantero del América y Atlético de Madrid fue el protagonista de una de las acciones más sorprendentes: tiró una rabona desde afuera del área que sorprendió a propios y extraños, pero pasó por encima del travesaño.
Luego de dejar en el camino a un defensor con una buena finta, Jiménez se vio muy sólo y decidió finalizar la jugada. El balón le había quedado para la zurda, pero lejos de golpear con su pierna menos hábil optó por hacer una excelente pirueta que dejó anonadados hasta a los relatores.
Es que claro, si esa pelota acababa dentro de la portería estamos hablando del mejor gol de su carrera y probablemente uno de los mejores tantos del año. No es la primera vez que Raúl intenta algo así, ante Manchester United hace unos meses hizo algo similar e incluso dio una asistencia de esta manera cuando jugaba en Benfica.
