David Silva, con sus 33 años, ya es una leyenda del Manchester City. Jugó más de 400 partidos, es capitán y titular indiscutido.

Superando los 70 goles, ya ganó 12 títulos con el conjunto inglés. Pero no todo fue color de rosas desde el comienzo.

Llegó allí mientras se disputaba el Mundial de Sudáfrica 2010, sorprendiendo a todos, hasta sus propios compañeros.

Fue Joe Hart, ahora arquero del Burnley pero que estaba en el City cuando el español se sumó al equipo, quien con mucha sinceridad comentó las primeras sensaciones que tuvieron.

"Habíamos gastado 30 millones de euros en un jugador pequeño y lento que solo podía usar un pie y no tenía idea de dónde estaba jugando. Parecía un gran tipo, pero ni siquiera sabía hablar inglés'', reveló.

Claro, al poco tiempo todo esto quedó atrás: "No fue desde el inicio, pero pronto subió el nivel, se adaptó y mostró su calidad. Es una locura. Es un jugador muy completo cuyo único punto negativo es su altura".