Marzo no comenzó nada tranquilo para el Barcelona: la noticia que recorrió el mundo fue la detención de Josep Maria Bartomeu, presidente del conjunto culé hasta hace unos pocos meses, implicado por el Barça Gate. ¿Qué es eso? La causa que investiga la persecución en redes sociales por parte del club a varias figuras del primer equipo.

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Sin embargo, este martes, Bartomeu quedó en libertad provisional después de negarse a declarar y ya está en su casa, aunque la causa no detiene su curso.

En simultáneo, Ronald Koeman tuvo que dar la protocolar conferencia de prensa previa a la vuelta de las semifinales de la Copa del Rey contra Sevilla en el Camp Nou. Al entrenador holandés le preguntaron justamente por el tema y salió a respaldar al expresidente, siendo uno de los pocos en Barcelona en tomar esa postura.

"Cuando la noticia salió el otro día, claro estuvo jodido porque conozco bien a Bartomeu y también a Óscar Grau, que estaba entre las cuatro personas. Y claro, me sabe muy mal para ellos. Creo que siempre tuve momentos excepcionales con ellos en poco tiempo. Bartomeu para mí siempre ha sido una persona excepcional", aseguró Koeman.

Para colmo, Barcelona subió a sus redes justamente esa declaración del entrenador holandés y generó más controversia respecto al expresidente, uno de los máximos responsables del actual presente de un club que hasta hace casi cinco años era el mejor del mundo.

Todo en un contexto donde Lionel Messi define su futuro en el club, que hoy más que nunca necesita indicios que esta crisis está en sus últimos meses y que puede cambiar con la elección de un nuevo presidente en los próximos días.