Tras igualar 1-1 en el Camp Nou, resultado más que positivo, Real Madrid mordió el polvo en la revancha disputada en el mismísimo Santiago Bernabéu, cayendo 3-0 ante Barcelona y despidiéndose en semifinales de la Copa del Rey.

Aunque la producción del equipo no fue mala, el resultado fue más que contundente y los aficionados Merengues se vieron necesitados de descargar su fastidio contra algún blanco.

El principal acusado fue el entrenador, por lo que el "Solari vete ya" sonó más fuerte que nunca en Madrid.  A su vez, los aficionados pidieron por el regreso de un viejo conocido al banquillo.

Una multitud, en las afueras del Bernabéu, gritó a viva voz el nombre de José Mourinho, entrenador que está sin equipo tras desvincularse del Manchester United.