Luego de varios meses sumergido en grandes preocupaciones, Barcelona parece haberse recuperado, al menos un poco. Y así afrontó un nuevo partido por el certamen doméstico.

Casi eliminado de la UEFA Champions League, el equipo comandado tácticamente por Ronald Koeman se presentó por una nueva fecha de La Liga de España, su gran objetivo.

Con el deseo de que Atlético de Madrid, el único líder, se caiga, la formación catalana se trasladó hasta Pamploma para encontrarse frente a frente con el complicado Osasuna.

Sin embargo, las cosas comenzaron bien para los del estratega holandés, que lograron ponerse en ventaja gracias a un buen muy tanto conseguido por Jordi Alba.

Posteriormente, Barcelona intentó liquidar el partido pero Osasuna contó con algunas chances para igualarlo. Hasta que, a los 38 del segundo tiempo, la visita lo liquidó.

Allí fue cuando Lionel Messi apareció en escena y asistió a Ilaix Moriba, que enganchó de forma fenomenal y sacó un estupendo remate para poner el 2-0 de Barcelona.