El Barcelona de Lionel Messi comenzó de la mejor manera en la primer jornada de la Champions League ante el PSV.

Con el argentino en su mejor modo, no le dio ninguna chance a un PSV que intentó en ataque de manera valiente, pero no pudo conseguir su objetivo.

Todo comenzó con una joya de tiro libre de la Pulga, para abrir el marcador y dejar sin chances a Zoet, el arquero rival. 

 

Desde ahí el Barcelona mantuvo la posesión del balón, controló el juego y buscó de a poco avanzar ante la desesperación del visitante.

El show de goles fue a partir de los 74 minutos, cuando una verdadera joya de Dembelé se metió en el arco que en el primer tiempo defendía Ter Stegen y ahora sufría el mismo Zoet.

 

La soltura de la ventaja cómoda hizo que el número 10 se despierte: la bestia metió un gol a los 3 minutos y otro faltando 5 para el final, sellando una verdadera goleada. 

 

Umtiti, la única mancha del partido: se fue expulsado por doble amarilla tras embestir violentamente al Chucky Lozano.