Todo lo bueno que había hecho Wilfredo Caballero en su debut con la Selección Argentina ante Italia, se le esfumó en un abrir y cerrar de ojos.
Mucho tuvo que ver el destino, porque no estaba designado para atajar en el duelo ante España, pero la lesión de Sergio Romero lo mandó a recibir cinco goles en la furiosa goleada local, 6-1 en Madrid.
Y no tuvo revancha con Chelsea, en su vuelta al primer equipo por Premier League en reemplazo de Thibaut Courtois. Porque Tottenham le propinó tres goles más, para que sean ocho en los últimos dos partidos.
Ademas, Caballero se llevó un duro golpe que generó nerviosismo en Stamford Bridge, aunque no le impidió finalizar el encuentro.