Ante Borussia Mönchengladbach, Inter ganó un partido clave por la fase de grupos de la Champions League.

Sin dudas, en lo que la previa fue catalogado como El Grupo de la Muerte está cumpliendo las expectativas.

Con un doblete de Romelu Lukaku, los de Antonio Conte ganaron 3-2, pero Ashley Young casi se carga toda la hazaña completa.

El exextremo del Manchester United apareció solo por el segundo palo abajo del arco en el área chica.

Sí, tenía que ser gol. No obstante, el balón le picó antes, intentó rematar y le pegó tan mal que la pelota le pasó de largo.

¡Para qué te traje!