Mauro Icardi era amo y señor de la cancha en el Inter antes de todo el escándalo sucedido en torno a su contrato, que lo alejó por mucho tiempo de las canchas.
Ahora de vuelta, la cosa no parece estar en orden para el delantero que sufrió el partido ante Frosinone, o al menos así se vio desde afuera.
El Inter ganó un duelo clave por 3-1 para seguir en el tercer puesto, bien arriba en la tabla y soñando con jugar la Champions League 2019/20.
Pero el delantero jugó muy mal, participó poco (más allá de una asistencia sobre el final) y pareció ser poco tenido en cuenta por sus compañeros a la hora de hacer el último pase.
Es más, a los de Spaletti les dieron un penal y el 9, que siempre se hacía cargo de ellos, no apareció para patear: fue Perisic el que lo cambió por gol.
Veremos como sigue la novela...
