El Zenit de San Petersburgo, que ya se había proclamado campeón de la liga rusa, firmó el doblete nacional al conquistar este sábado la Copa de Rusia, cuyo trofeo terminó dañando poco después de levantarlo.

Tras vencer 1-0 al Khimki (equipo de 2ª división) en Ekateriumburgo, el Zenit festejó su título, con los jugadores y miembros del cuerpo técnico saltando de alegría en el estrado donde fue entregado el trofeo. De repente, al capitán del Zenit, el serbio Branislav Ivanovic, se le escapó la copa de las manos. El trofeo sufrió distintos daños, con varios pedazos desprendidos.

Tras el inicidente, el Zenit de San Petersburgo se disculpó en las redes sociales por el incidente. Por fortuna, el hecho no pasó a mayores y todos los jugadores pudieron disfrutar con el trofeo, que solo sufrió daños en su parte superior.

Es el quinto título del Zenit en la Copa de su país y el segundo doblete nacional de su historia, tras el logrado en 2010. En este duelo, Wilmar Barrios fue titular y jugó los 90 minutos en la victoria que le permitió levantar su tercer título oficial desde que llegó a suelo europeo.