La carrera de un jugador profesional de fútbol tiene muchos vaivenes, saltos de calidad, viajes, trayectorias en ascenso y descenso, además de un apogeo y/o declive lógico por el paso del tiempo. Por su parte, la trayectoria de un futbolista de elite, se la relaciona con un club o un par de instituciones en particular debido a varias razones: idolatría, tiempo de estadía, sentido de pertenencia, títulos o cantidad de partidos disputados.

Estos fundamentos justifican que más de un hincha o amante del deporte rey a nivel se sorprenda y se olvide que se hayan puesto tal o cual playera o, simplemente, no sepan una parte de la vida deportiva de un jugador en específico. En este caso, repasaremos momentos en las carreras de las principales estrellas futbolísticas que no recordabas o, simplemente, no conocías.
 

Cafú (Zaragoza)

Después del histórico triunfo con su seleccionado en la Copa del Mundo de los Estados Unidos, Marcos Evangelista de Moraes llegó en 1995 a Real Zaragoza, en lo que sería su primera experiencia en el Viejo Continente. En este club, conquistó la Recopa de Europa, luego de una final mágica ante el Arsenal en el Parque de los Príncipes.

Claro que, su participación fue corta. Menos de 1000 minutos fueron los que disputó con esta camiseta a causa de una lesión en el pubis y por su competidor directo en el lateral derecho, llamado Belsué. Como el elenco español no decidió comprar su pase por un par de años más, el defensor brasilero decidió regresar a su país natal.

Marco Materazzi (Everton)

Después de tres temporadas en Italia, consolidado y destacándose en un club pequeño como el Perugia, el zaguero italiano Marco Materazzi arribó al Everton inglés, quien lo compró en 1998 por un año, tiempo en el que jugó 28 compromisos y marcó un solo tanto.

Las expectativas eran altas, teniendo en cuenta las condiciones futbolísticas que, con el tiempo, el defensor terminaría ratificando. Pero luego de no sentirse muy cómodo en aquel país, Marco decidió retornar a su club de origen para relanzar su carrera deportiva.

Casemiro (Porto)

Este, seguramente, será uno de los casos más llamativos del listado. Se trata de Carlos Henrique José Francisco Venancio, si el extraordinario mediocampista Casemiro, que estuvo a préstamo, desde Real Madrid, en Porto durante la temporada 2014/2015 a cambio de 1,2 millones de euros.

Luego del paso a un verdadero gigante europeo, el brasilero necesitó salir del club, para sumar minutos y experiencia. Y, pese a no haber obtenido ningún título con el Dragón, el jugador del scracht brasilero volvió al club dueño de su pase tras 28 encuentros oficiales y 3 goles.

Eusebio (Monterrey)

Eusebio da Silva Ferreira, la famosa Pantera de Mozambique, el mejor portugués de la historia junto con Cristiano Ronaldo, arribó a Rayados de Monterrey en 1975 como la primera estrella mundial en la Liga MX. Tras jugar unos meses en el futbol de los Estados Unidos, fue contratado para reforzar la ofensiva de un equipo que, desde hacía años, acechaba el título.

Su llegada trajo consigo al nuevo entrenador Fernando Riera, amigo y compañero del luso en el Benfica, pero no pudo triunfar tras una decena de partidos, 491 minutos y un solo gol -ante Jalisco el 20 de diciembre-, debido a una severa lesión en su rodilla derecha.

Gareth Bale (Southampton)

A los 9 años, el galés Gareth Bale sorprendió al Southampton en un torneo con Cardiff Civil Service FC y lo fichó. Siete años más tarde, ingresó a la academia del club inglés, donde terminaría debutando en la primera división el 17 de abril de 2006 ante Millwall, convirtiéndose en el segundo jugador más joven en la vida del elenco británico.

En total, fueron 45 partidos y 5 goles lo mostrado en el repertorio del extremo hasta el año 2007. Durante esa temporada, se quedó con el premio Carwyn James al mejor futbolista joven, entregado por la cadena BBC Wales.

Jordi Alba (Gimnástic)

Lógicamente, todos tendrán en sus retinas la extensa trayectoria que tuvo en el FC Barcelona y su destacado papel con la Selección de España. Pero no serán tantos los que recuerden que el lateral izquierdo Jordi Alba estuvo una temporada en el Gimástic de Tarragona.

Fue la 2008/2009, en la cual participó de 35 compromisos y llegó a convertir 4 goles -promedio de 0,11-, obviamente sin sumar ningún título en un equipo que está en permamente lucha por llegar a la máxima categoría. Aquel año resultó su salto, primero al Valencia para luego llegar al elenco catalán.

Arturo Vidal (Bayer Leverkusen)

La destacada trayectoria por el fútbol europeo, con pasos por los principales clubes de las mejores ligas del mundo, también tuvo un comienzo. En el período 2007/2011, el chileno Arturo Vidal vistió la playera del Bayer Leverkusen, equipo en el que logró destacarse año tras año.

De lateral izquierdo hasta posicionarse como mediocampista mixto, el experimentado centrocampista que se destacara también con su selección, perdió una final de copa nacional con Werder Bremen y metió su primer gol ante Hannover por la fecha 6 de la Bundesliga en su primera temporada.

Filipe Luis (Real Madrid)

Que haya formado parte de un momento muy destacado en la historia del Atlético de Madrid, no puede borrar que el marcador de punta brasilero Filipe Luis también vistió la camiseta del histórico rival en la capital española. Aunque, claro, la historia tiene contemplaciones. 

El lateral estuvo solo una temporada en Real Madrid Castilla, la filial de la casa blanca madrileña, durante la campaña 2005/2006, tras llegar a préstamo desde Rentistas por 150 mil euros. Nunca se sintió conforme y lo expresó de esta forma: "Pasé un año por allí y me fui, fue como un trámite cuando vine a España".

Landon Donovan (Bayern Munich)

En los comienzos del nuevo siglo, comenzaba a quedar en claro el crecimiento que luego evidenciaría el fútbol de los Estados Unidos, con jugadores que elevaban el nivel y que empezarían a ser transferidos a los principales mercados europeos. El experimentado enganche Landon Donovan se convirtió en el primer jugador de su país en jugar para el poderoso Bayern Munich.

Fue en la temporada 2008/2009, aunque nunca pudo aclimatarse a jugar en la Baviera y solo aguantó 3 meses -de enero a marzo-, disputando 153 minutos oficiales. Más allá de esto, su arribo afianzó la relación que aún se mantiene entre el elenco teutón y la nación norteamericana.

Juan Esnaider (Porto)

Un verdadero trotamundos del fútbol, con pasos por diferentes países, ligas y equipos. Entre su amplio palmarés en el Viejo Continente, aparece una oportunidad que casi nadie recuerda en el campeonato portugués, para vestir la casaca de uno de sus clubes más importantes.

A comienzos del Siglo XXI, el delantero argentino daría el salto desde Juventus a préstamo al FC Porto, pero terminaría entrando en solo 3 ocasiones y por liga -125 minutos en total-. Nunca logró entenderse con el entrenador Octavio Machado y eso, sumado a las lesiones musculares, le impidieron brillar lo que valió en su rápida y el regreso al fútbol de su país.

Kepa (Real Valladolid)

Condiciones para llegar a lo más alto del futbol mundial siempre parecen haberle sobrado al arquero español Kepa Arrizabalaga. Aunque claro, en sus comienzos, necesitó salir a prestamo de su club de origen, para ganar experiencia y minutos, situación recurrente dentro de un puesto tan particular.

En su caso, fue poco el tiempo que estuvo en Real Valladolid -temporada 2015/2016-, en calidad de prestado desde Athletic Bilbao a cambio de 400 mil euros. Fue siempre titular por LaLiga y luego volvió al elenco vasco. Luego de eso, se transformaría en el portero indiscutido del Chelsea inglés, para luego llegar al Real Madrid.

Frank Rijkaard (Real Zaragoza)

Llegó procedente del Sporting Lisboa para un corto periodo de tiempo, un idilio que comenzó en una temporada que ya entraba en su recta final. El neerlandés Frank Rijkaard supo vestir la camiseta del Zaragoza y cosechar cuatro victorias. Claro que, su papel en el equipo no coincidiría con la expectativa que había por un futbolista de su calibre.

El destacado mediocampista supo vestir la playera del elenco español en 1988, alcanzando un total de 990 minutos distribuidos en 11 cotejos oficiales. En ese corto y fugaz lapso, coincidió con colegas como Cedrún, Rubén Sosa, Señor y Pardeza. Se iría rápidamente a jugar al Milan.

Ciro Immobile (Juventus)

Uno de los más destacados capocannoniere de la actualidad en su país. Es que, salvo por un pequeño lapso en Borussia Dortmund, Ciro Immobile siempre jugó en la Serie A italiana. Aunque hubo un primer período, en el que no pudo demostrar la capacidad goleadora que se terminaría transformando en su principal cualidad.

De 2008 a 2010 estuvo en las filas de la Juventus, pero solo llegó a entrar 4 veces, no obtuvo títulos ni goles personales, todo esto después de haber pasado por las categorías cadetes y juveniles del elenco turinés. Al tiempo, entre 2012 y 2014 volvió a su institución de origen, pero también sin pena ni gloria.

Lass Diarra (Arsenal)

Dueño de una dilatada carrera, en la que vistió las camisetas de clubes muy importantes y trascendentes a nivel mundial, también convivió con cierta irregularidad, que no le permitió destacarse por completo en todos los equipos en los que le tocó jugar. Se trata del mediocampista Lassana Diarra, en este caso, para recordar su breve paso por el Arsenal.

Fue un solo año -temporada 2007/2008- para el francés vistiendo los colores del prestigioso elenco de la Premier, en el que no sumó estrellas individuales, pero sí se llevó un elogio de su entrenador, Arsene Wegner, al confirmarse su fichaje: "Diarra es un jugador muy polivalente que puede aportar muchas cosas. Trabaja duro, crea juego y puede hacerlo por el medio o derecha".

Lionel Scaloni (Atalanta)

Está claro que, ahora su carrera tomó otra dimensión, a partir del excelente papel que llevó adelante como entrenador de la Selección Argentina, con la que se consagró campeón del mundo en Qatar. Pero antes de eso, también tuvo un destacado recorrido como lateral por la derecha, jugando en diferentes ligas del planeta.

Seguramente, la que menos se recuerda debe ser su breve estadía que tuvo por Atalanta, antes de retirarse en la campaña 2012/2013, en la cual solo disputó 7 partidos y no pudo marcar goles. Tras su paso por Bérgamo, el defensor cerraría su carrera jugando en Lazio hasta 2015.

Rivaldo (Olympiakos)

Un verdadero crack que logró triunfar en cada lugar que le tocó jugar. Está claro que su mejor versión quizás se haya visto en LaLiga -principalmente con el Barcelona- y en la selección brasilera, pero Rivaldo también dejó grandes recuerdos con otras casacas.

Rivo se calzó la camiseta del Olympiakos griego desde el 2004 hasta 2007. Allí jugó un total de 101 partidos con los Rojiblancos, siendo el segundo equipo en su carrera con quien acumuló más minutos de juego, anotó un total de 43 goles, entregó 23 asistencias y logró consagrarse campeón de 3 ligas y 2 copas griegas. En 2013 se iría a jugar al Milan.

Mario Balotelli (Barcelona B)

El excéntrico y polémico delantero italiano Mario Balotelli también supo destacarse en las filiales del FC Barcelona, allá por el año 2006. Tenía apenas 16 años, aunque ya era un crack en potencia. Entonces decidió probar suerte en el elenco catalán, viajó a España y entrenó con el blaugrana.

Entrenado por Fran Sánchez, el atacante compartió tiempo de juveniles con Marc Bartra y Thiago Alcántara, además de maravillar a todos durante su estadía en Cataluña: marcó ocho goles en tres partidos. Sin embargo, el club no lo fichó por su alto costo. El 31 de agosto de ese año terminaría firmando un pre-contrato con el Inter de Milán.

Roy Makaay (Tenerife)

Su presentación no podría haber sido mejor: cuatro goles en nueve minutos al Werder Bremen de Alemania, en el torneo del 75º aniversario del club. El neerlandés Roy Makaay llegaba a Tenerife en 1997 por un par de temporadas, junto con su amigo Ferdi Vierklau, con la ilusión, justamente, de anotar muchos goles y ser figura del equipo.

En su primera temporada tuvo problemas de adaptación, sufrió por sus concentraciones con la selección holandesa -acudía con la Sub 21 y a veces con la absoluta- y padeció algunas lesiones. En el segundo año, consumado el descenso a Segunda División, hizo catorce goles. En total fueron 21 gritos, antes que pegara el salto al Deportivo La Coruña.

Garrincha (Júnior)

Manuel Francisco dos Santos ha sido uno de los mejores punteros derechos de la historia. Ganó el Mundial de Fútbol de 1958 y 1962 al lado de Pelé. Fue figura del Botafogo por más de 10 años pero su vida era desordenada por el alcohol y las mujeres. A mediados de 1968, Garrincha tenía 34 años y hacía varios meses no era el jugador importante que todos conocían.

Ese año, Junior de Barranquilla, que volvía a jugar el campeonato tras más de una década, contrató a Mané para llevar más público al estadio y romper el mercado colombiano. Sin embargo, y a pesar de haber sido recibido en el aeropuerto local por 2000 personas, el brasilero arribó excedido de peso y disputó un solo cotejo hasta que dejó el equipo. Igualmente, se ganó el apodo de La alegría del pueblo.

Mikel Arteta (PSG)

Aunque su carrera como jugador está más asociada por su tiempo en la Premier League con Everton y Arsenal, al comienzo de su etapa como futbolista, Mikel Arteta tuvo una cesión muy exitosa con el París Saint Germain, al punto de convertirse en una pieza importante del equipo que dirigía Luis Fernández.

El español pasó por el PSG entre 2000 y 2002, periodo en el cual pisó 35 veces el verde césped del Parque de los Príncipes, anotando un par de goles, para luego irse al Rangers de Glasgow, sin levantar ningún trofeo.

Edgar Davids (Crystal Palace)

Luego de estar dos años alejado del fútbol profesional, el mediocampista neerlandés Edgar Davids decidió retomar su carrera en Crystal Palace. La decisión la tomó en el año 2010, a los 37 años, y su estadía en la Premier League resultó sin pena ni gloria. Fueron apenas cuatro meses, jugando para un equipo que vagaba en el Championship, segunda división inglesa.

Luego de esas dos campañas fuera de competencia, la inactividad le pasó factura y se fue del elenco inglés para nunca más volver. Claro que, lo seguiría intentando y bajaría más de categoría -llegó a jugar en la 5° División- hasta su retiro definitivo en 2014.

Ever Banega (Inter)

En medio de sus dos pasos exitosos por el Sevilla español -en el que conquistó 3 Europa League- el mediocampista argentino Ever Banega, supo tener un breve paso por la ciudad de Milano, en Italia. El objetivo era buscar destacarse en el Inter de aquella ciudad, aunque no pudo logar su cometido.

Su recorrido en el club italiano duró apenas un año, a préstamo por parte de los andaluces en la temporada 2016/2017, en la que estuvo lejos de poder mostrar su mejor versión. Más allá de eso, participó en 32 encuentros entre liga y copa, aportando solamente 6 goles.

George Best (Fulham)

En la temporada 1976/1977 el Fulham, pese a disputar el campeonato de Second Division, fue capaz de incorporar a su plantilla a una estrella de la historia del fútbol, el mítico George Best. Claro que, ya no era aquel extremo ligero y escurridizo que los aficionados ingleses habían conocido durante sus apasionantes 13 años en el Manchester United. Así y todo, fue determinante durante su primer año en el club

El norirlandés llegó a disputar encuentros por los puntos en el conjunto londinense entre 1976 y 1978. Fueron 47 en total, entre los cuales totalizó una decena de anotaciones -0,21 por ciento de promedio de gol-, y no pudo lograr el ascenso con el equipo.

Dani Parejo (QPR)

Después de haber aparecido y debutado en la filial del Real Madrid -Castilla-, el mediocampista central Dani Parejo tendría la oportunidad de ganar minutos en el fútbol inglés. Pero el español nunca lograría consolidarse en Queens Park Rangers durante los 5 meses que duró su préstamo, por lo que volvería rápidamente a la Casa Blanca.

Con el dorsal 7 en su espalda, el ibérico arribó a la Premier League en 2008 para disputar apenas 18 partidos oficiales y dar dos asistencias, en media temporada. Esa fue toda su historia en el Reino Unido.

David Albelda (Villarreal)

Aunque su carrera futbolística lo encuentre más emparentado y relacionado con el Valencia CF, el ex mediocentro español David Albelda también supo calzarse la camiseta del Villarreal, rival clásico por cercanía geográfica del elenco Che, en un par de oportunidades.

La primera vez que pasó por el Submarino Amarillo fue en el año 1996, cuando el equipo se encontraba en Segunda División, etapa que le sirvió para adquirir la experiencia que le faltaba en el inicio de su vida profesional. La siguiente fue en la 1998/1999, primera vez del Villarreal en LaLiga, temporada en la que metió un par de goles y disputó más de 80 partidos.

Harry Kane (Leicester)

Corría el año 2013, cuando el destacado delantero inglés Harry Kane vivió 3 meses a préstamo en Leicester City, desde el Tottenham: 14 choques oficiales y un par de goles. Dicha cesión fue la última de cuatro en total para el atacante en sus inicios en el fútbol británico, tras sus pasos por Norwich City, Millwall y Leyton Orient.

El presidente de los spurs, Daniel Levy, estaba dispuesto a vender al futbolista, pero la operación no llegó finalmente a buen puerto por la intervención del entonces técnico londinense Tim Sherwood. Aunque el dirigente apostaba por delanteros como Roberto Soldado o Emmanuel Adebayor, el entrenador aseguró: "El chico se ha ganado el derecho a jugar". En aquella campaña 2014-205, Kane ya sumó 21 goles en 34 encuentros de Premier League.

Andrés D'alessandro (Portsmouth)

Brilló en su país, se destacó en la Bundesliga, y al enlace argentino Andrés D'alessandro le llegaba una nueva oportunidad de mostrarse en el fútbol europeo. Claro que, la experiencia no terminó saliendo como quería: estuvo muy poco tiempo en la liga inglesa, más precisamente en 2006 en el Portsmouth.

Tras fichar por media temporada en calidad de cedido, logró convertir un gol ante Charlton en los 13 juegos que dijo presente y que sirvieron para mantener al elenco en la elite de Inglaterra. Fueron apenas 6 meses. Tiempo suficiente para dejar maravillado a Mason Mount, una de las actuales figuras de la Premier League.

Claude Makelele (Celta de Vigo)

Apenas dos campañas entre 1998 y el 2000, con 28 compromisos y 5 goles, le bastaron al mediocampista tapón Claude Makelele para despertar el interés de clubes como Real Madrid y Valencia, tras destacarse en Celta de Vigo. Claro que su salida fue muy polémica, pues el francés se negó a entrenar hasta que se resolviera el problema con su contrato, finalmente el elenco celeste aceptó 14 millones de euros por su traspaso.

Su compañero en la zona medular, el campeón del mundo brasilero Mazinho, consiguió potenciarlo a un alto nivel para hacer cumplir una cláusula de su contrato: si venía una oferta de una institución grande, el club celeste la debía aceptar. Y así fue.

Genaro Gattuso (Rangers)

Antes de transformarse en una verdadera leyenda futbolística del Milan y la selección italiana, el mediocampista Gennaro Gattuso pasó por el Rangers de Escocia. Con 19 años y sin hablar inglés, su llegada a Glasgow tenía como trasfondo un alto contrato que lo invitó a abandonar a su querido Perugia.

Entre 1997 y 1998, el voraz y feroz futbolista azzurro que fue campeón del mundo, vivió en Gran Bretaña pero no logró sentirse cómodo y decidió volver a su país para jugar en Salernitana. De cualquier manera, jugó 50 partidos con el elenco escocés.

Franco Vázquez (Rayo Vallecano)

Después de haber mostrado todas sus condiciones en la liga de su país y haberlo ratificado en el Palermo italiano, al enganche argentino Franco Mudo Vázquez le llegaba una buena oportunidad de seguir demostrando sus condiciones, en este caso en el Rayo Vallecano.

En el elenco madrileño festejó cada gol que hizo tapándose un ojo con una mano en forma de parche en honor a su ex club Belgrano de Córdoba, que tiene el apodo de Pirata. Fue en la temporada 2013/2014, cuando el mediocampista se puso la playera rojiblanca. En total: 19 partidos y 3 anotaciones.

Romario (Valencia)

Dueño de una calidad goleadora como pocos, pero también de una vida repleta de licencias, Romario volvía al fútbol español después de haber jugado y mostrado su capacidad en el FC Barcelona. El campeón mundial en 1994 regresaba a LaLiga para vestir la camiseta del Valencia en la temporada 1996/1997.

En esta ocasión, el Chapulín no alcanzó a demostrar su talento y capacidad ofensiva durante sus escasos 11 partidos -con 5 goles incluidos-. La vida nocturna del delantero generó inestabilidad en el plantel y en el club, lo que desencadenó en su partida en 1997.

Sergio Romero (Mónaco)

Luego de surgir en Racing de Avellaneda y cumplir un papel destacado en la Eredivisie neerlandesa, el argentino Sergio Chiquito Romero comenzó una etapa de poca continuidad en el primer nivel internacional. En 2013, llegaba a préstamo al Mónaco proveniente de la Sampdoria por una sola campaña y con opción de compra, con la idea de competir por el puesto con el portero croata Danijel Subasic.

Pero el ex guardameta de la selección albiceleste apenas vistió el buzo monegasco en 9 oportunidades -su primer partido por liga fue recién en abril de 2014-, no ganó títulos y recibió 7 goles. Al final de la campaña, volvería al conjunto italiano.

Nicolo Zaniolo (Inter)

Surgido en el Virtus Entella, la 2016/2017 ha sido la temporada del traspaso del mediocampista ofensivo Nicolo Zaniolo por la filial del Inter, llamada Primavera, hasta dar el salto al equipo principal para el año 2018. pero aunque la expectativa era alta, solo llegó a disputar un amistoso de pretemporada.

Destacado referente de las selecciones juveniles azzurras, velozmente tuvo su revancha en la Serie A, fue con la camiseta de la Roma, donde ganaría una Supercopa nacional llegó a convertirse en el máximo artillero del certamen -13 goles-.

Nicolás Otamendi (Atlético Mineiro)

Inició desde muy joven en Vélez y, tras un gran Mundial en Sudáfrica 2010 bajo el ala de Diego Maradona, pegó el salto a Europa. Luego de un paso positivo por el FC Porto, Nicolás Otamendi fue comprado por Valencia. Pero el defensor argentino buscaba continuidad para llegar de la mejor manera al Mundial 2014, por eso decidió aceptar la oferta del Atlético Mineiro.

Se trató de un préstamo por 6 meses en el conjunto de Belo Horizonte, que se concretó a partir de la gestión que llevó adelante el portugués Deco. El marcador central llegó a vestir la del Galo en 12 ocasiones entre el Brasilerao y la Copa Libertadores.

Giuseppe Rossi (Newcastle)

Nacido en New Jersey, el talentoso delantero de familia italiana Giuseppe Rossi logró llevar adelante una interesante carrera, con picos altos, sobre todo en el momento de su arribo al Villarreal español, donde fue una de las figuras del equipo. Pero claro, en medio de esos vaivenes, también tuvo etapas olvidables.

Después de haber sido incorporado por el Manchester United, Giuseppe fue cedido a préstamo al Newcastle, donde pasó sin pena ni gloria. Fue en el 2006 y solamente disputó 13 cotejos oficiales, anotando un tanto. Sin alegrías colectivas, el atacante zurdo volvió al club dueño del pase, aunque su camino finalmente seguiría en Italia.

David Silva (Eibar)

El campeón del mundo en 2010 es considerado uno de los mediocampistas en el 11 ideal de la historia del Eibar, club que lo disfrutó en la temporada 2004/2005, a sus juveniles 18 años. Ese año, dirigido por José Luis Mendilibar, le bastó para catapultar su magia a la elite y luego crecer en instituciones de mayor renombre como Real Sociedad y Manchester City.

Silva fue el jugador más destacado de un equipo que asombró a propios y extraños por su buen juego y por un rendimiento por encima del esperado y eso que en su plantel contaba con jugadores de suma experiencia. Aquél año de aprendizaje lo moldeó y fue fundamental en el desarrollo posterior de su carrera.

Andrés Guardado (Bayer Leverkusen)

A finales de enero de 2004, el Bayer Leverkusen llegó a un acuerdo con el Valencia CF para obtener la cesión de Andrés Guardado, que seguía los progresos del futbolista desde meses atrás. De esta manera, se convertía en el primer mexicano en jugar en ese equipo y el quinto en la historia de la Bundesliga alemana.

Sin embargo, algunos problemas musculares y la falta de continuidad impidió a Guardado disfrutar de regularidad. Jugó por la Copa Alemana, una eliminatoria de Champions ante el PSG y 268 minutos en la Bundesliga. En su mayoría, como lateral izquierdo. En total, fueron 7 partidos oficiales.

Roberto Carlos (Inter)

Roberto Carlos vivió en el Inter de Milán una de las mejores etapas de su carrera, llegando a Italia con 22 años como un completo desconocido, a pesar de haber sido campeón con el Palmeiras y haber sido subcampeón en la Copa América de Uruguay con Brasil. El lateral izquierdo llegó a disputar 34 partidos oficiales, marcando 7 goles y dando 5 asistencias de gol.

Más allá de esto, el rol del brasilero se vio perjudicado con cada cambio de entrenador que el equipo vivió en esa temporada 1995/1996. Del toque, toque, toque de Luis Suárez, al rigor defensivo de Ottavio Bianchi -no lo dejaba pasar de la mitad del campo- y, por último, Roy Hogdson, quien lo torturó futbolísticamente, al punto de querer hacerlo jugar como delantero. Al año siguiente, emigraría al Real Madrid.

Laurent Blanc (Nápoli)

Era el principio de la década de los noventa, el Nápoli comenzaba a despedirse de su etapa más gloriosa, pero seguía siendo una opción más que atractiva para cualquier futbolista, sobre todo pensando en aquellos que estaban dando sus primeros pasos a nivel profesional. Ese fue el caso del campeón del mundo en 1998, Laurent Blanc.

Estuvo en el conjunto napolitano durante la temporada 1991/1992, en la cual disputó 31 compromisos oficiales y convirtió 6 goles. La estadía en Italia duró solo un año, ya que nunca logró aclimatarse, pero fue la primera en el extranjero dentro de su exitosa carrera profesional.

Leonardo (Valencia)

A los 22 años, convertido en una de las joyas del fútbol brasileño, Leonardo fichó por el Valencia CF despertando muchas dudas, ya que llegaba de una operación y sin haber realizado una pretemporada. Sin embargo, tardó en poco en mostrarse como un jugador de una técnica exquisita y con una capacidad para elaborar goles magistrales.

Con el paso de los meses, la llama se fue apagando y el jugador pareció perder interés por la ciudad y el país. Llegó en 1991 y terminó jugando 71 partidos -6 anotaciones-. Su mejor performance individual se dio tiempo después de firmar contrato, cuando le convirtió un gol a Cádiz, en el que llegó a eludir a medio equipo rival.

Jamie Vardy (Halifax Town)

Jamie Vardy nunca se imaginó que su carrera iba a ser maratónica. En 2007, jugaba en el humilde Stocksbridge Park Steels, de la Octava División inglesa, con un sueldo máximo de 30 libras esterlinas por mes. Por depresión, el delantero intentó quitarse la vida, pero la superó y comenzó su ascenso sin pausas.

Tras competir en el amateurismo, el atacante central pasó a Halifax Town en 2010, en ese momento en la Séptima División, metió 27 goles, y eso le valió fichar con Fleetwood Town, equipo de la Quinta, en el que alcanzó 31 tantos en un año. Esto despertó el interés del Leicester City, que lo terminaría contratando por un millón de libras, convirtiéndose en el jugador no profesional más caro en la historia de la liga.

Joshua Kimmich (Leipzig)

Tras un fantástico año en las juveniles del Stuttgart, fue el RB Leipzig -en ese momento se encontraba en Tercera División- quien apostó por el jugador y le ofreció un contrato para saltar al fútbol profesional. Y aunque en el comienzo no fue demasiado tenido en cuenta, consiguió dar la vuelta a la situación y hacerse con un lugar en el mediocampo del equipo. Era la temporada 2013/2014 y conseguía el ascenso a la Bundesliga 2.

Al año siguiente disputó un total de 27 partidos, la mayoría de ellos como titular. Fue clave en el equipo, convirtió tres tantos, dio un par de asistencias y empezó a destacarse, llamando la atención del siguiente club en su carrera: el Bayern Múnich.

Cristian Rodríguez (PSG)

Cristian Cebolla Rodríguez fue el primer uruguayo en llegar al PSG, que por esos momentos empezaba a hacer valer el poderío económico que luego lo transformaría en uno de los equipos más campeones de Francia. Pero su arribo al club fue traumático debido a no contar con el aval de su club de origen: Peñarol.

En 2004 llegó una oferta a la directiva y, a partir de ese momento, comenzó un tire y afloje, en el que el futbolista quedó rehén de la situación. Finalmente, en julio de 2005, viajó sorpresivamente a Francia para incorporarse a París Saint Germain. Estuvo varios meses sin poder jugar, hasta que en octubre de ese año fue autorizado por la FIFA. En esa temporada, ganó la Copa de Francia. Para la campaña 2007/2008, fue fichado por el Benfica de Portugal.

Shinji Kagawa (Zaragoza)

Doble ganador de la Bundesliga en 2011 y 2012 con el Borussia Dortmund y vencedor de la Premier League con el Manchester United en el 2013, Shinji Kagawa decidía marcharse al Zaragoza tras haber acabado su segundo ciclo en el club alemán. La noticia sorprendió a más de uno ya que el japonés abandonaba la primera categoría del fútbol alemán para irse a la Segunda División española.

El jugador llegó al club como el gran fichaje, ilusionando a la afición con una presentación en la que hubo más de 7000 espectadores. Ese torneo, marcado por la pandemia, marcó 4 goles y dio una asistencia en los 36 partidos que disputó. Al comienzo de la siguiente temporada el club rescindió su contrato en un gesto que no gustó nada entre los fanáticos.

Iván Rakitic (Schalke 04)

Luego de impresionantes demostraciones a su corta edad, Iván Rakitić -en ese momento en el Basilea de Suiza, país en el que vivía junto a su familia- empezó a ser pretendido por los grandes clubes europeos que mostraron interés por tenerlo entre sus filas. Finalmente llegó a Alemania para firmar con el Schalke 04, transacción que se concretó en junio de 2007.

El mediocampista croata supo resaltar usando los colores del elenco bávaro. Fueron 4 años en el club: 135 cotejos, 16 goles y 30 asistencias, y aunque no logró sumar ningún título, dio muestras de su talento, compartiendo equipo con compañeros de la talla de los españoles Raúl González y Jurado.

Juan Antonio Pizzi (Porto)

Sus buenas actuaciones en Rosario Central le permitieron a Juan Antonio Pizzi dar el salto a Europa y firmar, primero con el Tenerife, luego el Valencia, hasta llegar nada más y nada menos que al FC Barcelona. Lo que seguramente ha quedado en el olvido, es que el argentino estuvo media campaña cedido en el Porto.

Fue para la segunda mitad de la temporada 1999/2000, cuando llegó para defender los colores de uno de los elencos más importantes de Portugal. Pero una lesión en la rodilla no le permitió tener continuidad y sólo hizo 3 goles en los 11 partidos que disputó por la Liga. Al finalizar el campeonato, volvería a su Rosario natal.

Robert Pires (Aston Villa)

Luego de una campaña más que exitosa con el Villarreal, a Robert Pirés se le terminaría el contrato y el club decidió no renovarlo, quedándose sin equipo. Era la temporada 2010/2011 y, de forma inesperada, el delantero llegaría a un acuerdo con el Aston Villa para volver a la Premier League -anteriormente había jugado en Arsenal-.

El campeón mundial con Francia ya tenía 37 años y se encontraba en el tramo final de su carrera deportiva. La poca acción oficial que tuvo, lo haría empezar a definir su retiro, aunque su calidad se mantenía intacta y esto lo catapultó a India, donde dejaría la práctica activa del fútbol en 2015.

Ben Arfa (Valladolid)

Ben Arfa siempre será considerado por los franceses como uno de los talentos más brutos de su historia. Pero sus caprichos y su ética de vida hicieron que la eterna promesa se convirtiese en un fuego que se apagaba progresivamente. A comienzos de 2020, el ex del PSG iba a firmar con el Real Valladolid.

A las pocas semanas, la pandemia del COVID-19 iba a parar todas las competiciones en el mundo. Llegó con algún kilo de más y, pese a que adelgazó, se marchó tan rápido como llegó. Su resumen: sólo jugó cinco partidos -dos como titular- para un total de 158 minutos.

Daley Blind (Girona)

El neerlandés se convirtió en el fichaje más mediático de 2023 tras pasar del todopoderoso Bayern Múnich al modesto Girona. La vida le ha dado segundas oportunidades a Daley Blind. Y no sólo futbolísticamente recalando en un equipo que le permitirá tener un papel protagonista, también porque a sus 33 años ha sufrido y superado dos infartos que, implante de desfibrilador mediante, le permite seguir compitiendo al más alto nivel. 

Blind tuvo un muy buen Mundial de Qatar con su selección ya que anotó un gol, dio una asistencia y salió de titular en todos los partidos. En enero de 2023, el Bayern lo fichó hasta el final de la temporada. A pesar de sólo haber jugado cinco partidos con el conjunto bávaro, el defensor vive un nuevo desafío en LaLiga.

Mauro Icardi (Vecindario)

Puede que muchos piensen que el delantero argentino salió de la cantera del Barcelona. Pero no, Mauro Icardi vivió en Gran Canaria desde los 9 años y comenzó su carrera futbolística en el Vecindario. En este equipo canario -que pasó por Segunda División- no llegó a debutar, pero sí despertó el interés de los ojeadores del Barca, que rápidamente lo incorporaron para su cantera.

El rosarino asombró marcando 500 goles durante sus etapas como benjamín y cadete en el modesto club canario. Luego llegaría la etapa formativa catalana, de ahí, a la Sampdoria y, posteriormente, al estrellato.

Serge Gnabry (Arsenal)

Hijo de padre marfileño y madre alemana, Jean-Hermann y Birgit, Serge Gnabry nació en Stuttgart debido a que su papá viajó a Alemania para aprender el idioma y llevarle a su familia la cultura europea. Sin embargo, el amor cambió sus planes y se instaló para siempre en el país teutón.

En 2005, Serge se unió al VfB Stuttgart y, gracias a sus condiciones, fue vendido al poderoso Arsenal. Llegó al club a los 16 años, pero pasó directamente a la Sub 18. En la siguiente temporada fue convocado al primer equipo y se convirtió en el tercer jugador más joven en debutar con el el elenco londinense en la Premier League. Con el paso del tiempo fue perdiendo la confianza del entrenador Arsène Wenger, y terminaría siendo cedido.

Fabio Coentrao (Zaragoza)

Una experiencia que salió muy, pero muy mal. Sobre todo, porque el protagonista fue un jugador que apenas tres años más tarde formaría parte de la plantilla de un Real Madrid que fue campeón de todo lo que le tocó jugar. Pero allá por el año 2008, Fabio Coentrao fue incapaz de ganarse la titularidad con la camiseta del Zaragoza.

El jugador luso llegó cedido al club aragonés, cuando estaba recién descendido a Segunda División, como parte de la venta del argentino Pablo Aimar al Benfica. Sin embargo, su paso por el equipo, que esa misma temporada recuperó la categoría, no pudo ser peor. El jugador apenas contó con minutos y abandonó el club a mitad de temporada bajo acusaciones de llevar una vida demasiado licenciosa para un deportista.

David Beckham (Preston North End)

Mucho antes de convertirse en la superestrella mediática que todos conocemos, David Beckham debutó con el Preston North End en la tercera división -de aquel entonces- de la liga inglesa, ahora EFL League Two. Aquel joven de 19 años no era un nombre tenido en cuenta por Alex Ferguson.

Fue la temporada 1994/1995 cuando pasó cedido desde su segunda casa, Manchester United, por solamente 3 meses. La experiencia fueron 90 días de gimnasio, un par de tantos y 5 partidos oficiales, hasta que finalizó su cesión con el humilde conjunto. Un año más tarde, Beckham fue una pieza clave del equipo que ganó la Premier League y la FA Cup.

Johan Cruyff (Levante)

Johan Cruyff es indiscutiblemente uno de los mejores jugadores del siglo pasado y de la historia del fútbol. Pero en 1981, con casi 34 años cumplidos, no estaba bien económicamente por algunas malas inversiones y necesitaba dinero. Entonces, firmó contrato con Levante para que el club multiplique los ingresos del público al estadio, a cambio de 10 millones de pesetas en total y 2 millones de la mencionada moneda por partido jugado.

Su debut se dio con triunfo por 1-0 sobre Palencia, pero los resultados no acompañaron y finalizaron en el noveno lugar, a siete puntos de los que finalmente alcanzaron la máxima categoría. En esos cuatro meses, Cruyff apenas jugó diez partidos y anotó dos goles, ambos en el mismo partido: un empate 2-2 ante Real Oviedo.

Mohamed Salah (Basilea)

En marzo de 2012, cuando Salah aún estaba en el Al Mokawloon, la liga egipcia fue suspendida. Entonces, el 16 de marzo de ese mismo año, la selección Sub 23 de Egipto se midió al Basilea en un partido amistoso en Suiza. Mohamed jugó la segunda parte y metió dos goles. Un mes más tarde, el fichaje de Salah por el club basileo se hacía oficial.

En Suiza se destapó con 20 tantos en dos temporadas. El delantero levantó la Super Liga Suiza en 2013, año en que fue galardonado con el premio al Futbolista del Año en África. Sus grandes encuentros ante el Chelsea en la Champions League 2013/2014, marcándole goles en ambos encuentro, le permitieron cerrar su arribo al club londinense.