Alarmas encendidas. Mientras en Norteamérica daban como hecho que Estados Unidos, Canadá y México se llevarían con facilidad la sede del Mundial del 2026, aparentemente la votación no sería tan sencilla y Marruecos aparece como una verdadera amenaza al sueño del norte del continente.
La información la reseñó ESPN a través de una nota de investigación. Varias fuentes vinculadas a la dirigencia del fútbol internacional apuntarían a que la aspiración marroquí contaría con fuertes apoyos de África, Asia y Sudamérica, lo cual complicaría a la opción norteamericana que cuenta con Europa y Concacaf.
“Entendemos que en una elección competitiva (como lo es esta) hay muchos factores diferentes que inciden en una decisión”, dijo Sunil Gulati, ex presidente de la federación estadounidense.
Tiene mucho peso, además, el sentimiento anti-estadounidense que despertó la actual gestión del presidente de ese país, Donald Trump.
Y como para hacer más “interesante” la recta final de la toma de la decisión, el ex presidente de la FIFA, Sepp Blatter, reapareció en las redes sociales para involucrarse con el tema.