Apenas se habían disputado 13 minutos del partido amistoso entre Croacia y Brasil que tuvo lugar en Anfield, estadio del Liverpool inglés. Fue entonces que Tite saltó del banco de suplentes con un evidente gesto de preocupación por el estado físico de Thiago Silva.
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El defensor brasileño, muchas veces capitán del seleccionado, recibió una descalificadora entrada de AndrejKramaric, quien impactó de lleno en su rodilla.
El golpe requirió de la intervención inmediata del cuerpo médico de Brasil y dejó a ThiagoSilva, quien dicen no tiene asegurado su lugar en el Mundial de Rusia, con una molestia evidente en la continuidad de la primera mitad.
Aunque debió ser expulsión para el delantero croata del Hoffenheim alemán, el árbitro decidió castigarlo solo con tarjeta amarilla.