Carlos Salcedo es uno de los mejores zagueros centrales de la Liga MX, sin ninguna duda. El elemento de Tigres UANL tiene un gran talento y demuestra en cada partido qué es lo que lo llevo a ser fichado por equipos como Fiorentina de la Serie A o Eintracht Frankfurt de la Bundesliga. Sin embargo, también ha dado que hablar por cuestiones extrafutbolísticas en el último tiempo, lo que ha generado que pierda algo de prestigio y lo que habría ayudado a que deje de ser considerado para la Selección Mexicana.

El oriundo de Guadalajara es una pieza fundamental en el esquema táctico de Miguel Herrera en los Felinos, por lo que su ausencia en los últimos 2 partidos del Torneo Apertura 2021 no pasó desapercibida. El Titán llegó a estar internado por una digestión estomacal, tal como indicó el Piojo, por lo que no fue tenido en cuenta ante Atlético de San Luis y Necaxa. Este malestar, sin embargo, no lo privó de celebrar su cumpleaños a lo grande...

De acuerdo a la información brindada por Cancha en la columna de SanCadillaNorte, Carlos Salcedo realizó una importante fiesta el domingo por la noche junto a todos sus compañeros de Tigres UANL. La misma fue en su casa, inició a eso de las 11 de la noche y finalizó pasadas las 6 de la mañana. A pesar de que los vecinos y las autoridades se quejaron en la puerta de su domicilio, el futbolista hizo oídos sordos y continuó con la música a todo volumen. 

El Titán Salcedo, de fiesta y molestando a sus vecinos (Imago 7)

El Titán Salcedo, de fiesta y molestando a sus vecinos (Imago 7)

"Escogió el domingo, ya con todos sus compañeros liberados, porque no entrenaron ayer ni hoy, para armar pachanga en grande en su casa ubicada en una colonia residencial del sur de la Ciudad, para el rumbo de la Carretera Nacional. La fiesta inició desde las 11-12 de la noche del domingo y se acabó pasadas las 6 de la mañana del lunes. La calle estaba llena de autos de lujo y la música a todo volumen", explicó el portal mencionado.

Más adelante detalló: "Los vecinos lo reportaron a la caseta de vigilancia y le marcaron en cuatro ocasiones a su casa para que le bajaran al ruido, pero jamás contestó y la fiesta se terminó hasta que le dio la gana, pasadas las 6 de la mañana. También fueron a tocar a su puerta y no abrió, lo que molestó más a todos los vecinos. Ya más tarde, como a las 10 de la mañana, un vecino fue directamente a manifestarle su enojo y el jugador simplemente contestó: 'Pues a mí me vale madre'".