Pumas lo tenía y lo dejó ir. Estuvieron por delante de Atlas en el marcador, pero la expulsión de Higor Meritao complicó el trámite rumbo al final del partido. Julián Quiñones logró rematar un balón dentro del área por una desatención de la zaga. Antes de eso, sus delanteros fallaron opciones claras. Sin embargo, Rafael Puente, estratega del equipo, no tiene nada que reprocharle a su atacante.
“Al final, valoro muchísimo la competitividad de Juan de que siempre quiere ser protagonista, siempre quiere la pelota y se quiere mostrar de cara al gol. Es un referente de este equipo. Creo que el comportamiento defensivo fue bueno. La que pega en el poste, de Julián, se invalidó por fuera de juego. Después tuvieron una opción que encontraron por cuestiones muy propias de la superioridad numérica, que es el tiempo y espacio para tirar un centro. En términos generales, el equipo va en una línea ascendiente. Conscientes de que el camino es este”, comentó.
El estratega de los auriazules no negó la molestia que le generó no sumar los tres puntos en casa. Al final, es de vital importancia que consigan todas las unidades posibles en el estadio Olímpico Universitario. Recalcó que van por el camino correcto para conseguir su mejor versión.
Aceptó la molestia
“Con mucha amargura por cómo se dio el partido. Me parece que lo tuvimos controlado. Tuvimos un par de veces la oportunidad clara de ampliar la ventaja. Desafortunadamente no la pudimos capitalizar. Después, con la inferioridad numérica, era de esperarse que se vinieran encima. Sabíamos que iban a tirar centros al área. En una de esas jugadas accedieron al empate. La amargura de dejar ir dos puntos en casa, pero tendremos que ir de visitantes ahora”, comentó.