Alianza Lima ha tenido una primera mitad del año con altos y bajos en cuestiones anímicas. Hasta el 17 de marzo, por ejemplo, la oscuridad y depresión eran pan de cada día en la Victoria. El descenso había sido un golpe muy fuerte.
A partir de ese día, les volvió el alma al cuerpo gracias al TAS. Con eso, volvían a primera y volvían a ilusionarse. Jefferson Farfán se animó a regresar y el éxtasis fue aún mayor. Sin duda, fue una de las noticias más importantes relacionadas al fútbol peruano de los últimos años.
El 10 de la Calle hacía un nuevo debut en la Liga 1 y se mostraba diferente. Anotó y marcó la diferencia. Lamentablemente, la luna de miel no fue eterna. Después de unos cuantos minutos sumados, la Foquita comenzó a sufrir de un dolor que lo perseguía hace tiempo. Sí, otra vez era su ligamento.
Entonces, se comenzó a hablar mucho al respecto. Algunos periodistas, con mucha irresponsabilidad, lo retiraron. La evaluación tuvo que ser más a profundidad. El último diagnóstico decía que podían ser 10 meses de para. Desde Alianza, confiaban en que podía llegar a la Fase 2.
Este miércoles, se supo más del caos gracias a José Marín, periodista que escribió lo siguiente en twitter: “Jefferson Farfán continúa con su recuperación y da buenas señales con relación a su retorno, el mismo que -de no mediar contratiempos y permanecer evolucionando como hasta hoy- podría darse entre agosto y septiembre. #AlianzaLima queda a la espera de su referente para la Fase 2”. El regreso de la Foca podría ser antes de lo planeado ¡Suena bien!
