A finales de marzo del 2016, la Selección Peruana no estaba bien. Después de empatar contra Venezuela en Lima y perder contra Uruguay de visita, quedó en evidencia que había que renovar. Ricardo Gareca se dio cuenta y para la Copa América de Estados Unidos, hizo los cambios necesarios. La idea era pensar en el futuro sin abandonar el presente.
En aquel torneo hecho en Norteamérica, nos fuimos dando cuenta que era urgente tener sangre nueva. Raúl Ruidíaz, Andy Polo y Edison Flores dijeron presente. Dejamos a nada menos que al Pentacampeón mundial en fase grupos. Con estos jugadores también, el camino rumbo a Rusia 2018 se fue abriendo. Sin duda, Estados Unidos 2016 marcó un antes y un después.
Este jueves, en Brasil 2021, surge un nueva oportunidad. Como hace cinco años, la última fecha doble de eliminatorias ha dejado algunas lecciones. Con todo el amor que le tenemos a Jefferson Farfán o a Paolo Guerrero tenemos que saber que no van a ser eternos, que ya están de salida. Felizmente, parece que aparecieron sus remplazos y hay nuevos líderes. Esta transición, además, parece más gradual, menos conflictiva.
La lista del Tigre tiene ese mensaje y tiene también aquel buen precedente. Ahora, comienza el reto. El primera partido será este jueves contra el mejor equipo de Sudamérica: Brasil. Gareca es el único técnico en la historia de la Blanquiroja que le ha ganado dos veces: en el 2016 y en el 2019. El argentino además ya ha roto la estadística con Perú en más de una oportunidad.
Los jugadores, por su lado, tienen mucho por demostrar. Se necesita calidad, pero también compromiso y actitud para ganarse su lugar. Nadie es eterno. Todo tiene su final. Hasta el campeón mundial, como diría Hector Lavoe, y, ahora, hasta el goleador de todos los tiempos. La historia se vuelve a escribir. Eso sí, los hinchas tenemos que estar siempre ¡Incondicionales! ¡No abandonar y confiar! ¡Por amor a la camiseta de todos! ¡Comienza otro sueño! ¡Vamos Perú!
