Este sábado, Everton visitó al Brighton Hove Albion, en duelo válido por la tercera fecha de la Premier League en Inglaterra. Sin embargo, una de las acciones que se llevó las miradas de los aficionados, fue el amago de bronca que tuvieron Dominic Calvert-Lewin y el brasileño Richarlison, todo por saber quién pateaba un penal.

Cuando el reloj circulaba por el minuto 56, hubo falta a favor de los azules del Liverpool, el atacante de la Canarinha, tomó la pelota con la firme convicción de que él iba a ser el encargado de patear el lanzamiento libre, pero una mirada al banco técnico le quitó la ilusión y tuvo que hacerle la pelota al delantero inglés.

Fue tan grande el enfado que tuvo la cacatúa, que resultó manoteando a sus compañeros y con ganas de pelear, claro está, el británico que pateó el penalti, no le correspondió a la discusión. Al 58’, se produjo el gol de Calvert-Lewin, buena lanzamiento esquinado e imposible para el arquero español Robert Sánchez, quien antes del lanzamiento intentó intimidar al ariete del seleccionado de los Tres Leones.

Luego de la anotación, se vio a los dos futbolistas, que en el partido compartieron frente de ataque hablando y sin problema luego del intento de bronca entre los dos antes del cobro. Cabe recordar que ese fue el segundo gol del partido y con el que se sentenció la cuenta a favor del equipo que dirige el español Benítez, y que no contó con el defensa central colombiano Yerry Mina.

Con los tres puntos, Everton llegó a 7 puntos al paso de tres fechas en la Liga inglesa. Ahora mismo son cuartos por detrás del sorpresivo West Ham, Chelsea y Liverpool; en el balompié británico el único club que puede a rebasarlos y tomar la primera posición es Tottenham Hotspur, club que tras dos fechas tiene puntaje perfecto.