La pelea entre Manchester City y Liverpool por la Premier League se trasladó hasta la última fecha y los comandados por Josep Guardiola terminaron quedándose con el trofeo. Sin embargo, tuvieron que sufrir de más para conseguirlo.
Un triunfo ante Aston Villa en el Etihad Stadium les alcanzaba para gritar campeón, pero los de Steven Gerrard se las pusieron difícil al adelantarse por 2-0 a los 69 minutos. Una ráfaga goleadora de Gundogan, en dos oportunidades, y Rodri dio vuelta la historia.
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Con un gol de la visita, el festejo quedaba para los de Anfield Road, pero el tiempo se consumió y los fanáticos del Citizen festejaron invadiendo el campo de juego. Guardiola pidió la hora en los últimos segundos y se mostró conmovido por la consagración.
El español comenzó con abrazos con su cuerpo técnico derramando lágrimas y rápidamente se fue para los vestuarios. El ex Barcelona y Bayern Múnich sumó la cuarta Premier League a su palmarés personal y no pudo evitar la emoción en público.