Golden State Warriors llegó a su sexta final de conferencia en la última década luego de vencer a Memphis Grizzlies 110 a 96 en las semifinales del Oeste, en un encuentro donde ninguno de los Splash Brothers ni el mejor defensor del conjunto de Steve Kerr fue la figura descollante.

Stephen Curry apareció en momentos clave del encuentro, con su clásico tiro de larga distancia en momentos clave, y finalizando la noche con 29 puntos, 7 rebotes y 5 asistencias. El otro splash brother, Klay Thompson, culminó la noche con 30 puntos.

Además, Golden State tuvo a favor también la colaboración en defensa habitual de Draymond Green, quien se encargó defender de buena manera el tiro de los Grizzlies. Aún así, la verdadera estrella de los Warriors no fue ninguno de ellos.

Levon Looney, la figura de Golden State Warriors

 

Más allá de que las tres clásicas figuras tuvieron un excelente partido, quien realmente fue el factor clave para la victoria de Golden State Warriors fue su pívot, Kevon Looney, quien se encargó de bajar un total de 22 rebotes en el encuentro.

Looney entró en acción sobre todo con su capacidad reboteadora en la ofensiva, dandolo una chance a los Warriors de tener jugadas de segunda oportunidad para poder anotar. Es el primer jugador de Golden State en tener en un encuentro de NBA Playoffs más de diez rebotes ofensivos y defensivos desde la década de los 80´.