Pese al veranito que significó la victoria por UEFA Europa League ante el humilde AEK Larnaca de Chipre, Bayer Leverkusen volvió a caer en la oscura realidad que atraviesa en la Bundesliga.

Como visitante del Fruburgo, otro de los equipos que transita por la zona baja de la clasificación, no logró pasar del empate sin goles, redondeando así un total de siete puntos en siete jornadas.

Ni siquiera Lucas Alario, que había marcado un doblete entre semana ingresando desde el banco de suplentes y que esta vez fue titular, pudo aportar los goles que necesitaba el Leverkusen para desnivelar a su rival.

Así las cosas, el equipo que dirige Heiko Herrlich se quedó undido en la decimocuarta posición y a dos unidades de los puestos de descenso.