A mediados del 2017, en medio de la participación en la Copa Libertadores, a River lo sacudió un bombazo: CONMEBOL le notificó que Lucas Martínez Quarta y Camilo Mayada dieron positivo en un control antidoping por la fase de grupos. 

Pasaron los siete meses de sanción y ahora podrán volver a competir. De cara al 2018, el volante uruguayo habló sobre la difícil situación que debió pasar lejos de las canchas: "Lo peor fue no competir, quedarme afuera de todos los viajes. En momentos donde yo creía que el equipo me podía necesitar y saber que no podía estar". 

Por otra parte, Mayada subrayó que los insultos contra él le hicieron mucho daño: "Me dolió que cualquier persona me dijera 'falopero'. Ahora con Lucas (Martínez Quarta) iremos a las canchas y nos gritarán eso". Recalcó que lo sufrió más por su familia, que también fue afectada por las repercusiones.

Además, el jugador volvió a catalogar como una "injustcia" el doping y sobre los días de la sanción confesó: "No lo podía creer. Lloré cuando fui a declarar a Conmebol".