Los Angeles Lakers acaban de ser campeones de la NBA, pero están obligados a volver a ser competitivos en la próxima temporada. ¿Por qué motivo? Porque son el equipo más ganador de la historia junto a Boston Celtics y porque además tienen en su plantilla a LeBron James, quien es considerado uno de los mejores jugadores de la historia.
Los Lakers formaron una buena plantilla la última temporada, pero sufrieron grandes pérdidas en la presente agencia libre. Luego de haber conseguido el anillo, varios jugadores entendieron que era el momento de elevar su precio de mercado y pedir más dinero, aunque Rob Pelinka se movió a tiempo incorporando a Dennis Schroeder y Montrezl Harrell.
Rajon Rondo dijo desde un principio que no sabía si regresaría a la franquicia angelina y, este sábado, se confirmó que terminó arreglando con Atlanta Hawks a cambio de dos años y 15 millones de dólares. Otro caso similar es Avery Bradley, quien ahora estará en Miami Heat y, en otro contexto, Dwight Howard se inclinó por Philadelphia 76ers a cambio de un contrato mínimo.
LeBron James y su despedida a Rajon Rondo
El guardia fue clave para Los Angeles Lakers en los playoffs, demostrando su experiencia y determinación llegando desde los suplentes. Rondo fue crucial para ganar el anillo y así lo entendió LeBron: “¡Buena suerte mi G! No lo ganamos sin ti. Es un placer hacer equipo contigo estos últimos 2 años”.
El mensaje de guerra de LeBron James
Dwight Howard rechazó a los Lakers y firmó por los Sixers, aunque eso no es problema. Llegó alguien que está en su prime: Montrezl Harrell. Y, LeBron James, sabe que esa incorporación, sumada a la de Schroeder y Wesley Matthews, significa que darán pelea por retener el campeonato NBA y envió un mensaje más que claro en sus redes sociales.
