Era el partido que tendría todos los focos de las cámaras en la jornada de este domingo en la NBA, pero con estrellas por doquier, fueron dos jugadas polémicas las que encendieron el duelo entre Houston Rockets y Los Angeles Lakers. ¿Los protagonistas? DeMarcus Cousins, LeBron James y Markieff Morris.

Cousins venía de ser expulsado el pasado lunes con tan solo tres minutos de juego y en el duelo contra los Lakers solo tuvieron que pasar 8 para sucediera la misma historia. La primera polémica llegó porque DeMarcus quiso defender a un compañero de los Rockets que cayó al suelo luego de una acción de juego con Morris.

La reacción de Cousins fue empujar a Morris y con la fuerza de la acción Markieff terminó en el piso. De inmediato, el jugador de los Lakers se levantó y confrontó a DeMarcus con otro empujón. Si no es porque los separan, en la duela del Toyota Center se hubiese presenciado una pelea al estilo NBA.  

El manotazo de DeMarcus Cousins a la cara de LeBron James

Sabemos que detener a LeBron James cuando penetra en la pintura es una de las cosas más difíciles en la NBA, pero a DeMarcus Cousins se le volvieron a ir las luces y en el intento por frenar a la estrella de Los Angeles Lakers le dio un manotazo en la cara al 'Rey'.

Cousins terminó por ser expulsado del juego entre Houston Rockets y Los Angeles Lakers por las dos acciones antideportivas que tuvo contra Markieff Morris y LeBron James. Literalmente, DeMarcus quiso acabar con el equipo californiano en tan solo ocho minutos de juego.