Durante mucho tiempo, el interés mutuo existente entre Paul George y Los Angeles Lakers fue un secreto a voces, y es que el alero quería salir de los Indiana Pacers y siempre fue un fanático angelino desde la infancia.

El nativo de California eventualmente terminó en el Oklahoma City Thunder y, tras su vergonzosa eliminación en los playoffs, se presumió que George llegaría como agente libre a los Lakers, especialmente si llegaba LeBron James.

Sin embargo, George prefirió extender su contrato en el Thunder para unir esfuerzos con Russell Westbrook, ignorando por completo las pretensiones de los Lakers. Ahora, finalmente reveló el por qué:

"Oklahoma es donde me siento cómodo. L.A me puede odiar o amar, la decisión fue mía. No fue algo en contra de LeBron como si no quisiera jugar con él, o que prefiriera a Russell Westbrook. Honestamente, ambos son excelentes jugadores, pero quería darle otra oportunidad a jugar con uno de los mejores bases de la liga, quería ver qué podíamos lograr. Además, L.A es como mi casa, vengo 3-4 meses acá, así que no la extraño".

Ahora, el alero tendrá la misión de liderar al Thunder en los playoffs, mientras que LeBron y sus Lakers los verán desde casa mientras se preparan para un verano muy agitado y la próxima campaña.

Seguramente, la llegada de uno de los mejores defensas y anotadores de la liga podría  haber servido para ayudar a un equipo que terminó siendo el hazmerreír de la liga tras ni siquiera llegar a los playoffs.