El fútbol mundial se encuentra de luto. Roger Lukaku, exfutbolista belgo-congolés y padre de Romelu, delantero internacional del Napoli y máximo goleador histórico de Bélgica, y de Jordan, defensor de Adanaspor en Turquía, murió este lunes, a sus 58 años en Kinshasa, actual República Democrática del Congo.
Llegado a Bélgica desde su país natal en 1990, Roger Lukaku desarrolló la mayor parte de su carrera como jugador en el fútbol belga, con un breve paso por Turquía. Su trayectoria incluyó 135 partidos oficiales y 47 goles en equipos como Boum, Zeraing, Germinal, Eekeren, Malines y Ostende, donde finalizó su etapa profesional en 1999, aunque continuó algunos años en categorías amateur hasta 2007, cuando se retiró definitivamente a los 40 años.
En el plano internacional, Roger defendió la camiseta de Zaire, nombre que tenía en aquel momento la República Democrática del Congo, en 11 ocasiones, dejando una huella imborrable en su país natal como referente de la selección africana.
Más allá de su carrera como jugador, fue un pionero en el desarrollo del fútbol en su tierra, siendo uno de los fundadores del Sporting Club Rojolu en 2010, un club cuyo nombre se forma con las iniciales de Roger, Romelu y Jordan.
A pesar de no haber trascendido las causas de la muerte, la noticia fue confirmada a través de las redes sociales de Romelu Lukaku, donde publicó un emotivo mensaje. “Gracias por enseñarme todo lo que sé. Te estoy eternamente agradecido y te aprecio. La vida nunca volverá a ser la misma. Me protegiste y me guiaste como nadie más podría haberlo hecho. No volveré a ser el mismo. El dolor y las lágrimas fluyen a raudales. Pero Dios me dará la fuerza para recomponerme. Gracias por todo, papá”, escribió.
