Luego de unos días calmos, la tranquilidad se disipó en Boca y el escándalo volvió a estar presente en medio del clásico ante Racing, ya que en el vestuario durante el entretiempo, Darío Benedetto y Carlos Zambrano tuvieron un tenso cruce de palabras que pasó a mayores y la discusión pasó a pelea.

Tanto la policía y periodistas presentes en el lugar de los hechos como el propio entrenador Hugo Ibarra confirmó que esto fue así y aún no se conocen consecuencias posibles para los dos futbolistas, pero sí se supo que desde la Comisión Directiva pretenden tomar cartas en el asunto, aunque antes también hubo intervenciones desde sectores más cercanos al fútbol.

Primeramente, el castigo llegó de parte de Juan Román Riquelme, quien a altas horas de la noche luego del empate con Racing se dirigió con la delegación al hotel donde concentaron post partido y les dijo lo que opinaba al respecto. El periodista Martín Arevalo fue el encargado de confirmar esta reunión: "Riquelme les dijo que estaba muy dolido con lo que había visto. Que les faltaron el respeto a todos, a los hinchas y al escudo. Que si estaban buscando puteadas, se las van a ganar. Que fue un papelón. Y que se pueden odiar de lunes a sábado pero que el domingo tienen que ser hermano. Que son futbolistas, no boxeadores", afirmó el jornalista sobre lo sucedido en el Hotel Intercontinental entre Román y los futbolistas.

Además de esto, se confirmó que entre el Vicepresidente de Boca les avisó que el escándalo no pasaría sin consecuencias, sino que incluso se encargó de anunciarles a Benedetto y Zambrano que habrá una reunión con el Consejo del Fútbol para evaluar como seguir esta situación. Pero, hay más que eso, ya que no solo intervendrían los sectores relacionados al fútbol en sí, sino que también se incluirá a la Comisión Directiva del club de la Ribera, quienes ya tendrían pautado sancionar a los futbolistas.

Según sentenció el periodista Diego Monroig, la CD de Boca no definió aún si los castigos serán económicos o deportivos, o en su defecto si las sanciones vendrán por ambos sectores. Todo esto, tanto para Darío Benedetto como para Carlos Zambrano. La pelea empieza a tener sus consecuencias