Sebastián Villa ya no pertenece a Boca desde que se le dio salida mediante una disputa que involucró a la AFA y a FIFA, la cual se desencadenó luego de ser marginado del equipo tras la declaración judicial de culpabilidad en la causa por violencia de género contra Daniela Cortés.
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En la misma, se lo consideró culpable y por eso fue condenado a 2 años y un mes de prisión pero con la posibilidad de excarcelación debido a que la condena es menor a tres años. Sin embargo, esta no era la única causa abierta en el expediente de Sebastián Villa, ya que además de la denuncia hecha por Cortés que data de abril del 2020 pero que tuvo resolución a mediados del 2023, el colombiano fue denunciado en 2021 por Tamara Doldán por abuso sexual con acceso carnal.
Luego de poco más de dos años desde la denuncia, este martes se confirmó de manera oficial que la causa será llevada a juicio oral en la Cámara de Apelaciones de Lomas de Zamora, mismo lugar donde se dio dictó la sentencia anterior en su contra.
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Concretamente, la resolución fue tomada por la Sala 1 de dicha Cámara de Apelaciones, la cual confirmó el pedido de la fiscal Vanesa González, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 3 de Esteban Echeverría. Allí, se buscará que Sebasitán Villa sea juzgado por el delito de “abuso sexual con acceso carnal” ante la denuncia de Rocío Tamara Doldán (27), y la misma prevé una pena de hasta 15 años de prisión, que en este caso no serían excarcelables, por lo que en caso de ser declaración culpable, el futbolista colombiano irá a prisión.
Las obligaciones de Villa tras haber sido declarado culpable en la primera causa
Condenado por los delitos de lesiones leves y amenazas contra su ex pareja Daniela Cortés, Villa debe cumplir con una serie de obligaciones:
- Fijar residencia y someterse al control del Patronato de Liberados en forma bimestral
- Evitar cualquier tipo de contacto con Cortés y los familiares de ella
- Realizar un tratamiento psicosocial y participar de diferentes talleres sobre violencia de género.
Todo lo que pasó entre Villa y Boca tras la condena
Una vez declarado culpable, el colombiano pidió tomarse un tiempo para no entrenarse con sus compañeros, el club le dio el OK y él volvió a su país. Pocos días después, llegó a Ezeiza una sorpresiva intimación del futbolista para que lo dejaran entrenar, la cual fue desestimada. Boca le exigió que regresara para entrenarse aparte.
Luego de unos días haciendo tareas a contraturno, el jugador volvió a irse y apareció en España, entrenando en un equipo de Tercera División. Mientras el club lo demandaba por incumplimiento de contrato, el delantero fue a Turquía para cerrar su llegada al Kasimpasa, considerándose jugador libre. Finalmente, ese arribo se cayó luego de que los turcos se anoticiaran sobre su vínculo con el conjunto de la Ribera.
