El partido entre Independiente Petrolero ante Deportivo Táchira se puede considerar histórico para los venezolanos por varios motivos. Primero, porque volvió a ganar de visitante en Copa Libertadores después de 13 años; segundo, por ser el único equipo en la historia del torneo en tener dos goles de arco a arco en la competición, aunque hay polémica.
44 minutos del primer tiempo. Cristopher Varela la saca bien lejos de su arco buscando a su delantero, la pelota pica, pasa al defensor, pasa al arquero rival y se dirige derechito hacia el gol. Increíblemente, Anthony Uribe la empuja en la línea -como si hiciera falta- y se adjudica el tanto a su cuenta personal. ¿Y entonces?
Las repeticiones no dan la certeza de que el balón ya estuviera adentro en el momento del remate del 9. La cuenta oficial de la Copa Libertadores se lo dió al atacante, aunque son muchos los que sostienen que el poroto hay que sumárselo al arquero.
En la transmisión ni siquiera atinaron a enfocar la reacción de Varela tras el pelotazo largo, pese a que algunos compañeros lo señalaban como el goleador de la noche. De todas formas, lmás importante para Táchira es que sumo de a tres y ya acumula 4 puntos en su grupo de la copa, lo que lo ubica como único escolta de Palmeiras en el grupo A.







