Pasaron varias horas, pero el shock que tiene Lionel Messi por no seguir en Barcelona es el mismo que tenemos todos. Cuando todo se encaminaba a una lógica y poco novedosa renovación, un repentino comunicado destrozó las ilusiones del pueblo culé y de los que soñaban con ver al mejor del mundo vistiendo la camiseta blaugrana.

Esta mañana,Joan Laporta convocó a una rueda de prensa para explicar lo que todos queríamos saber, que era qué sucedió en el medio para este triste final. “Quiero decir que desgraciadamente hemos recibido una herencia en la que no tenemos margen con la masa salarial”, fue lo primero que soltó el presidente.

“Los números son peores de los que habíamos previsto. La deuda también es más elevada, con unos contratos elevados y eso no nos permite tener margen salarial. Esto va atado al Fair Play Financiero”, explicó Laporta y agregó: “Para tener este Fair Play el Barça debía estar de acuerdo con un acuerdo que hipotecaba los derechos televisivos del club. No estaba dispuesto a hacerlo por nadie”.

El máximo mandatario del club catalán explicó durante cuánto tiempo debían hipotecar ese ingreso para la institución, como para que toda la afición entienda el porqué de la decisión: “Quizá la única vía para tener margen salarial para inscribir a Leo Messi pasaba por aceptar una operación que era poner a disposición los derechos televisivos del Barça durante medio siglo”.

Por último, Laporta cerró desmintiendo versiones sobre que el comunicado haya sido alguna estrategia para presionar a LaLiga: “¿Situación irreconducible? No quiero generar falsas esperanzas, como es obvio el jugador tiene otras propuestas, hay un tiempo límite. Si lo del Fair Play está cerrado, debe tener tiempo. Hemos pasado por varias fases”.