Aún se siente el temor, como así también se escuchan los gritos, los llantos, y se puede ver el ardor en los ojos llorosos de los hinchas de Gimnasia que sufrieron la represión policial en las inmediaciones del estadio Juan Carmelo Zerillo, mientras se disputaban los primeros 9 minutos del partido frente a Boca.

A pesar de que Sergio Berni, el Ministro de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires, además de Axel Kiciloff, que oficia como Gobernador de la misma provincia, tomaron la decisión de detener a Juan Manuel Gorbarán, jefe del operativo para el partido del último jueves, por "estrago seguido de muerte", como así también de Nahuel Falcón, el policía que le disparó a Fernando Rivero (camarógrafo de TyC Sports), por "lesiones leves agravadas", el dolor no cesa.

El jueves 6 de octubre se produjo el deceso de César Regueiro, hincha de Gimnasia que falleció producto de un paro cardiorespiratorio y que, mientras un bombero intentaba realizarle las maniobras de RCP, la policía bonaerense continuó reprimiendo en las cercanías a ambas personas. Y después de que se realizaran diversos pedidos de justicia, como así también un minuto de silencio en cada estadio del fútbol argentino, los jugadores del Lobo emitieron un mensaje con una remera que llevaban por encima de la camiseta habitual.

"No fueron incidentes. Fue represión. Fuerza pueblo Tripero. Siempre fuertes, siempre unidos", sentenciaron los futbolistas de Gimnasia y Esgrima de La Plata en la previa al choque con Banfield en el estadio Florencio Sola, donde las lucieron durante la entrada en calor, como así también al momento de salir al terreno de juego. El pedido es unánime: que se haga justicia.