El nuevo Matagigantes del fútbol argentino tiene nombre, se llama Platense y se lo debe a la dupla técnica Favio Orsi-Sergio Gómez. Dejó en el camino en duelos de eliminación directa y de manera consecutiva a Racing en el Cilindro de Avellaneda, a River en el Monumental y a San Lorenzo en el Nuevo Gasómetro. Ahora, el Calamar enfrentará a Huracán en la final del Torneo Apertura 2025 y está a un paso de conseguir el primer título de su historia.
“Falta un escalón más. No sé ni lo que estoy pensando, estoy como flotando. Los jugadores son unos animales, viven cagados de hambre, con la heladera vacía“, deslizó Gómez post clasificación. “Humildad y sentido de pertenencia son las claves. Con Sergio pasamos por todas: de las muy buenas a las muy malas”, añadió Orsi cuando le tocó hablar. Por lo que nos obliga a retroceder en el tiempo.
En el 2011, cuando Gómez aún jugaba pero a sus 29 años encaminaba su retiro como futbolista, recibió el llamado de Oscar Santángelo para sumarse a su cuerpo técnico que en ese entonces dirigía Fénix. Exactamente la misma propuesta le hizo a Orsi, que ya había colgado los botines y era entrenador en la liga de Escobar. Y así arrancó la historia…
Favio tuvo un paso por las categorías inferiores de River, también fue futbolista profesional pero una lesión lo obligó a dejar las canchas y a ponerse el buzo. Corría la temporada 2012/13 y ya sin la presencia de Santángelo en el club blanquinegro, Orsi y Gómez comenzaron como dupla técnica e hicieron una promesa: llegar a Primera División.
El efecto fue prácticamente inmediato porque en los primeros meses lograron alcanzar el Reducido y conseguir el ascenso a la Primera B Metropolitana. Luego tuvieron una breve estadía en Deportivo Español y pasaron a Flandria, donde hicieron historia. Recibiendo apenas nueve goles en 19 fechas, obtuvieron el recordado ascenso a la Primera Nacional.
Pese a que no pudieron mantener la categoría se fueron como ídolos y escalaron en Almagro, aunque se fueron a rápidamente a San Martín de Tucumán. Iban punteros en soledad pero la pandemia y la anulación del torneo les jugó claramente en contra. En 2021 arribaron a Ferro y, pese a haber quedado cerca del sueño, renunciaron por no conseguirlo.
En 2022 se hizo realidad lo utópico: dirigir en Primera. El éxito en la división más alta inició en Godoy Cruz y empezaron a hacer historia. Aquel año vencieron al River de Marcelo Gallardo por 2-0 en el Monumental. “Si no ganás en canchas como esta, no trascendés. Del que pierde nadie habla“, sentenció Sergio Gómez en aquel entonces, donde adelantaba de qué estaba hecha la dupla.
Además de tener saldo positivo ante el Millonario -otra utopía-, también pudo festejar ante Boca al vencerlo 1-0 en 2024 en Vicente López. Y como si eso fuera poco, en este Torneo Apertura eliminó a tres grandes al hilo: Racing, River y San Lorenzo. “Muchas personas se sienten identificadas con este equipo, sabemos nuestras limitaciones y conocemos nuestras virtudes”, sostuvo Orsi en las últimas horas.
Ahora van por la gloria eterna y en búsqueda de volver realidad otro sueño de la dupla. Además, quieren reversionar una vez más el famoso cántico que une a los jugadores con los hinchas en estos días. Antes era: “Este es el famoso Tense, el famoso Calamar, ya ganamo’ en el Cilindro, ahora en el Monumental” y ahora evolucionó a: “ya ganamo’ en Bajo Flores, ahora vamo’ a la final”.
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