La tensión tras el fallido cruce entre Brasil y Argentina por las Eliminatorias Conmebol sigue creciendo entre los hinchas brasileños y los argentinos. En esta ocasión, uno o más argentinos hackearon una Agencia Nacional de Brasil y publicaron una bandera argentina con una frase.
Las redes sociales permiten un intercambio entre personas de distintos países con una facilidad admirable, algo que hasta hace un tiempo no era posible. Esto ayudó a establecer relaciones a distancia y conocer de manera más fácil lo que sucede en las demás naciones.
+ ¿Cuándo podría FIFA resolver la situación del Brasil vs. Argentina?
Pero claro, todo tiene su contra. Luego del partido suspendido entre Brasil y Argentina, hinchas argentinos y brasileños viven una constante guerra cibernética en las redes sociales. Esta vez, según informaron distintos medios brasileños, un grupo de argentinos hackeó la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria de Brasil (Anvisa).
El ataque se produjo en la página oficial del organismo, en el sector donde los viajeros ingresan para completar el formulario que les permite viajar al exterior. Los hackers argentinos publicaron una bandera argentina seguida de la frase “No estamos de cuarentena para andar por sus servidores ¿Nos van a expulsar también?" escrita en portugués.
Anvisa: ¿qué es la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria de Brasil y cómo fue hackeada?
Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria de Brasil (Anvisa) es un organismo regulador del gobierno de Brasil fundado en 1999. Tiene como responsabilidad el control sanitario y la protección de la salud pública, por lo que tomó un alto grado de protagonismo durante la pandemia.
En los últimos días quedó en el ojo de la tormenta ya que fue el encargado de la suspensión del partido disputado entre Brasil y Argentina por considerar que no se habían respetado los protocolos en la antesala del choque.
Debido a esto, un grupo de argentinos hackeó el sistema de la agencia para publicar una broma con la bandera de Argentina con una frase incluida. Por ahora los involucrados mantienen el anonimato y se desconoce cómo lograron acceder al sistema.
