Todavía no se sabe que sucederá con el futuro de Mauro Zárate. La única certeza es que el delantero le puso un final a su historia en Boca, sin haber sido tenido en cuenta por el técnico en el último tiempo y teniendo una relación poco feliz con el Consejo de Fútbol. De esa manera, incluso antes de que se jueguen los últimos partidos de la primera mitad del año, pasó a otra etapa.
Llegado desde Vélez con mucha polémica de por medio, nunca pudo explotar todo su potencial como atacante y más allá de que tuvo buenos tramos con diferentes entrenadores, jamás logró establecerse como titular indiscutido, teniendo de igual manera el apoyo de varios de los hinchas que mucho se ilusionaro cuando llegó años atrás.
Ahora, con la Copa América de por medio y un mercado de pases que será un poco más largo, él descansa junto a su familia esperando por las ofertas que puedan llegar tanto de Argentina como del exterior, para decidir en dónde hará la pretemporada y seguirá su carrera buscando una vez más ser protagonista.
Mientras tanto, se divierte con su pareja, quien en Instagram nos suele mostrar cómo pasan el día a día, siendo una historia la que se destacó en las últimas horas. Pasa que el futbolista estaba con el celular y ella, para molestarlo, le preguntó qué estaba haciendo.
Lejos de querer tener problemas, al instante dio vuelta la pantalla y dejó que los cientos de miles de seguidores de Natalie Weber estén al tanto de que nada raro pasaba en su dispositivo. Está muy bien.
