La Selección Argentina de Básquet le dijo adiós a los Juegos Olímpicos, luego de la estrepitosa derrota que le propinó Australia. Pero más allá de ello, llegó el momento de una despedida más que significativa para el deporte argentino. Luis Scola, uno de los mayores exponentes del básquet mundial, le puso punto final a su etapa en el seleccionado.

Ante esto, empiezan a aparecer los primeros pedidos de homenaje para Luifa. Uno de sus primeros entrenadores, Adrián Amasino, ya elevó una propuesta que no suena tan descabellada. "La Confederación Argentina de Básquet debería retirar la camiseta número 4. Debería ser un homenaje: la 4 es de Scola, no la puede usar nadie más. Desde muy chiquito, siempre eligió ese número, porque su papá Mario, también usó ese número", manifestó en una entrevista con Súper Deportivo Radio por Radio Villa Trinidad.

Amasino fue uno de los primeros en ver el potencial de quien sería una de las máximas figuras del básquet mundial de los siguientes años. Entrenó a Scola cuando tenía siete años en el Club Ciudad y se llenó de elogios para él. "Para mi humilde opinión, es el mejor jugador de la historia de la Selección Argentina de Básquet. De hecho se retira a los 41 años, cuando tranquilamente se podría haber retirado unos años antes para disfrutar a su familia. No creo que surja otro como él", expresó.

El entrenador también mencionó cuáles fueron sus sensaciones al momento en que el Saitama Super Arena se paró para despedir a Scola. "Cuando se paró el estadio para aplaudir a Luisito, como sigue siendo para mí, la primera imagen que se me pasó por la cabeza fue su llegada al club con 7 años. Le di la pelota y se fue a tirar abajo del aro en su primer entrenamiento. Esa fue una imagen muy linda que se me pasó por la cabeza", comentó. Y agregó: "Esta mañana se me caían las lágrimas, no podía verlo. Fue una emoción gigante. Hoy es una leyenda y pensar que uno lo conoció de muy chiquito. Será raro ver la Selección Argentina sin él jugando".

La Selección Argentina de Básquet perdió este miércoles ante Australia por 97-59 en lo que fue el último partido de Luis Scola con el seleccionado. La jornada se llenó de emoción al momento en que abandonó el campo de juego para recibir un merecido aplauso general tanto de sus compañeros como de sus rivales. "Me voy en paz", suscitó tras el partido.